“Aquí desde el primer día que cobren su sueldo le van a entrar con el cruce, no es diezmo, es una aportación voluntaria por parte de cada uno de ustedes, así es la política aquí y se aguantan si no quieren perder el trabajo”, son las palabras que Sandra Cecilia, hermana de Ricardo Salgado Vázquez, les canta a los 30 militantes de Morena que trabajan en las oficinas de Casa de Campaña Morena, actualmente Centro de Integración para el Bienestar en Tláhuac, y a quienes les advierte que a su hermano, subdelegado de los Servidores de la Nación en la demarcación, se deben dirigir como “El Jefe”.

Lorena, Octavio, Bernabé, Verneralda y Ambar, se acercaron a Crónica para denunciar que la corrupción, el principal cáncer por el que lucha el gobierno de la 4T está imparable en Tláhuac ante el amparo de la familia Salgado, quienes han hecho de los moches, desviación de recursos de programas sociales y cobros en nómina de personas inexistentes dentro del partido, una mina de oro donde obtienen dinero extra a costa de los propios servidores de la nación y de las personas vulnerables.

Lorena, una de las afectadas, relata que su primer sueldo como servidor de la nación, el 29 de enero de 2019 lo recibió con entusiasmo y felicidad, ya que era la primera recompensa por tantos meses de arduo trabajo en apoyo al presidente Andrés Manuel López Obrador y a Morena, pero el gusto le duró poco, ya que casi en el instante en el que recibió su primera paga se le exigía “con el pase de charola”, que debía contribuir con mil pesos de su sueldo mensual de 8,800 pesos, para apoyar las arcas del subdelegado Ricardo Salgado, y lo mismo ocurre con los militantes de la Unidad Básica de asistencia (Ubas), que son los que andan en programas sociales en las calles y que de su sueldo de 6,400 mensuales también les quitan mil pesos.

“Era increíble que parte de mi esfuerzo fuera mermado de esa manera, la hermana del propio Ricardo, Sandra Cecilia, era la encargada de decirle a nuestros coordinadores de qué se trataba y no había de otra, ya que todos en Tláhuac le temen a Ricardo y a su familia, ya que se les relaciona con gente peligrosa del Cartel de Tláhuac y pues, aunque con coraje e impotencia, teníamos que dar ese dinero. Primero fueron mil pesos, pero ya después a algunos nos lo bajaron a 500, pero no deja de ser un abuso y arbitrariedad. En una ocasión un compañero que recién cobró su pago en cheque, la misma hermana de Ricardo lo acompañó al banco a cobrarlo para que al cash, le diera los mil pesos del diezmo o cruce, esas son fregaderas”.

Verneralda, otra joven servidora de la nación con lágrimas a punto de brotar, comenta a Crónica que todo el ambiente laboral en la sede de Morena en Tláhuac es de terror, no llega uno al trabajo con el entusiasmo de que vas a dar tu máximo esfuerzo, ya que el primer pensamiento es ?y ahora que me espera?-

“Sandra Cecilia tiene la misma escuela que su hermano Ricardo, y cuando nos avisa que el Jefe bajará para hablar con todos, nos advierte que cando él hable no debemos mirarlo, no debemos dirigirle la palabra ni contradecirlo, además de que no debemos grabar nada, nos quitan los teléfonos celulares y cuando Ricardo se va nos los devuelve. Nos ha dicho que si no cumplimos eso el jefe a ella la regañara y habrá represalias. Imagínate, si eso le hace a su hermana, que nos esperamos los demás. Es un tormento trabajar en ese lugar y lo peor es que las más altas autoridades de Morena no hacen nada, deben saber algo, porque hay denuncias, pero no han hecho nada”.

Ambar otra servidora de la nación fue más allá en su denuncia y acusó que en el Centro de Integración de Morena en Tláhuac el abuso de autoridad, el maltrato y la corrupción brotan en cada rincón de este lugar y sino, que se haga una auditoría a fondo y verán que no se descubre en ese lugar.

“Si realmente se quiere acabar con la corrupción se debería abrir una investigación contra Ricardo Salgado, su hermano Rigoberto (el diputado) y toda su familia, que investiguen sobre la procedencia del dinero que les llega. Compañeras militantes con las que seguimos en comunicación aseguran que tienen registrados a familiares como servidores de la nación en la demarcación, pero solo eso, ya que sus pagos los cobra directamente el Jefe Ricardo y su hermana. Lo mismo ocurre con el apoyo a las personas vulnerables, ya sean con alguna discapacidad o de la Tercera edad. Se nos ha pedido, porque yo lo hice cado trabajé en Tláhuac. Llenas la forma con los datos del beneficiario, lo entregas en la oficina y cuando llega el beneficio para quien lo necesita, lo cobran el Jefe y su familia, y a quienes deberían de entregárselos jamás les llega, pues cuando estas personas acuden para saber de su trámite, se les dice que aún no sale, cuando en realidad ya se está cobrando”.

Octavio es un servidor de la Nación que cuenta que desde que antes de que el presidente ganara las elecciones en el 2018, él siempre ha comulgado con los ideales de Andrés manuel López Obrador, incluso desde que estuvo en el PRD, por lo que apoyar en su campaña fue algo que hizo de corazón y convicción, pero asegura que cuando fue enviado a Tláhuac para continuar con sus servicio como militante de Morena, se encontró con la otra realidad, la que ensucia el camino que todos los morenistas han tratado de marcar en el combate a la corrupción y de ayuda a los más vulnerables, y es que asegura, en Tláhuac, los encargados del Centro de Integración del Bienestar, buscan su beneficio propio, abunda la corrupción, hay denuncias de abusos sexual de compañeras y hay amenazas con despidos si no se cumple la orden del “Jefe”.

“Aquí si te inconformas las represalias son inmediatas, no hay libertad de comunicación, de opinión y abundan las amenazas, los insultos y agresiones verbales por parte del propio jefe Ricardo. Si alguien es llamado a su oficina, como medida preventiva para no grabar nada que pudiera comprometer al Jefe, se deben dejar los teléfonos celulares afuera, ya en la oficina uno es sometido con amenazas e insultos y advertencias de que si no haces lo que se te pide te puedes largar”.

Bernabé coincidió con Octavio y también denunció que sus labores en Tláhuac no solo se limitaban a recorrer las comunidades y buscar a personas que necesitaran de ayuda mediante los programas sociales, sino que también era el de acarreo de gente para actos de campaña o de apoyo a Rigoberto Salgado, actual diputado y hermano del Jefe.

“Es de todos conocido que en los mítines de apoyo a los candidatos se invita a familiares y amigos para que por amistad te ayuden al asistir a algunos actos políticos. En Tláhuac la orden es que debes llevar como mínimo a 10 personas, a las que como ayuda se les entregan 100 pesos por asistir. Si no cumples con la cuota tienes que pagar 100 pesos de tu bolsillo si no cubres con la gente que te comprometiste a llevar, eso es una arbitrariedad, no sé si el presidente López obrador sepa cómo se está manejando la situación en la alcaldía, pero hay dinero que pagar para todo y en verdad no creo que en Palacio Nacional desconozcan esta situación”.

Asimismo, Bernabé acusó que “aunque su horario marcaba de las 9 a 6 de la tarde, por caprichos de Ricardo se nos exigía rebasar nuestro horario hasta pasadas la 1 de la mañana o más tarde, sin importarle qué tan lejos vivía cada uno, pero la necesidad del trabajo nos hace aguantar, pero siempre hay un límite, aunque sabemos que al denunciar estos maltratos y abusos laborales podrían traer consecuencias, pues al Jefe a su familia se les vincula con gente mala ligada al narco”.

Otra de las órdenes que tienen los servidores de la nación en Tláhuac es que se debe avisar al Jefe si hay ataques contra él o su familia en redes sociales, por lo que de inmediato se pide a todos mandar mensajes desde sus cuentas de Twitter o redes sociales en contra de quien está informando de cosas sobre Ricardo, hasta que se logra bloquear esa cuenta, y también se ordena mandar mensajes a la cuenta del Jefe en donde deben abundar mensajes donde se hable bien de él y de sus acciones.