Opinión

Murakami o López Obrador

Murakami o López Obrador

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La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Cuando la realidad es irresistible,

la ficción es un refugio

Mario Vargas Llosa

MUY ESTIMADOS LECTORES:+El año pasado, coincidiendo con el inicio de su gestión, leí la novela 1Q84, del escritor japonés Haruki Murakami, que es la historia de dos personajes muy unidos en su adolescencia, pero en un punto de sus vidas, sus mundos se separan y cada uno modifica su existencia cuando, sin saberlo, ingresan cada uno a un mundo distinto y paralelo.

Ucronías, es como se llama a este tipo de novelas.

… Algo similar parece haberle ocurrido, presidente, como también a la realidad mexicana que usted vive.

Durante casi tres décadas fue usted un político que disparaba acusaciones tan constantes como certeras contra lo que funcionaba mal en el país. Ahora, pero ya en el poder, busca la realidad y no la encuentra. Y viceversa: la realidad tampoco le encuentra a usted…

Salvo un par de puntos —pensiones a adultos mayores y aumento al salario mínimo—, el resto de su gestión deja mucho qué desear. Incluso, y está bien, la gente le aprueba pero percibe su ineficacia gubernamental y así lo declaran en las encuestas.

Veamos algunos casos de ineficacia en que incurrió usted antes de la pandemia:

Presumió que gracias a sus medidas anticorrupción, su gobierno ahorró un billón 300 mil millones de pesos. ¡Espléndido, Presidente!.., ¿pero dónde están? ¿En qué se ocupan u ocuparon? Y si hubo un ahorro tan grande, ¿cuál fue su necesidad de utilizar el Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios? Porque si nos dice que se usaron para repartir dinero con sus programas sociales, la experiencia indica que eso no genera desarrollo…

Afirma que “avanzamos en el rescate de PEMEX y de la CFE, a las que la corrupción y la embestida privatizadora pusieron al borde de la desaparición”. Sin duda la petrolera era un botín para el sindicato y sus funcionarios, pero actualmente no hay un solo líder sindical de la petrolera que —se sepa— haya sido investigado. Y las “aportaciones” de Emilio Lozoya parecen de dudosa utilidad para ponerlas de ejemplo contra otros funcionarios corruptos.

Este año de 2020 es en el que menor ha sido cifra de barriles arrancados al mar desde 1970. Las empresas calificadoras tienen en la guillotina a la paraestatal y afirman que mantener la actual estrategia costará dos puntos del PIB. La idea suya es que México consuma la gasolina que produce, pero con la enorme fortuna invertida en su rescate, parece que la estamos pagando a precio de oro…

Antes de ser electo, dijo usted que ordenaría el regreso de los militares a los cuarteles. Ahora, las Fuerzas Armadas lo mismo construyen sucursales bancarias y aeropuertos que atienden hospitales y capturan narcos. Asignarles tantas tareas sin rendición de cuentas es, con todo respeto, al menos preocupante e invita a la sospecha de una cooptación para evitar la oposición al cambio de régimen.

Lo que más preocupante es el desmantelamiento de las instituciones, Presidente, diseñadas colegiadamente y puestas en funcionamiento para que las políticas públicas sean de largo aliento y no dependan de la voluntad de un líder. Si el diseño tiene fallas o la corrupción penetra, siempre hay oportunidad de corregir. Pero a usted le gusta —como a Donald Trump y a Steve Bannondeconstruirlo todo.

Por ello cabe preguntar pero qué necesidad había de desaparecer el Seguro Popular sin tener listo el INSABI; suspender guarderías de SEDESOL y escuelas de tiempo completo o pelearse con empresarios, analistas políticos, organismos de la sociedad civil, medios de comunicación, partidos de oposición, mujeres, organismos autónomos, el INE y tantos más.

Usted, Presidente, no debe confundir su deseo de la realidad con la realidad misma. Ésta es dura y pasa la factura. Lástima que el cobro para usted será en baja de votos y para nosotros sea de baja en nivel de vida…

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