La japonesa Naomi Osaka, vencedora del Abierto de Australia, ascendió a la segunda plaza de la clasificación de la WTA, que ocupaba la rumana Simona Halep, aunque todavía sigue lejos de la número uno, la australiana Ashleigh Barty, a 1,351 puntos.

La estadounidense Serena Williams protagoniza el otro cambio en el Top 10, al subir cuatro puestos y llegar al séptimo peldaño. Claro está que el movimiento más importante entre las mejores jugadoras lo acapara la también estadunidense Jennifer Brady, finalista en Melbourne.

Brady sube 11 posiciones y se instala en el puesto 13, lo que causa, entre otras, la bajada de un puesto de la española Garbiñe Muguruza, ahora decimoquinta.

Sara Sorribes (70), Paula Badosa (73) y Carla Suárez (89) son las otras españolas entre las 100 mejores.

La única jugadora iberoamericana en el Top 100 es la argentina Nadia Podoroska, número 44 tras superar la primera ronda en el Abierto de Australia.