Opinión

NFL: una liga sin par

NFL: una liga sin par

NFL: una liga sin par

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Cuenta la leyenda urbana que el futbol americano de la NFL llegó a suplir ese ejercicio devoto de los estadunidenses de ir a misa por ir al estadio o al televisor para no perderse los juegos del domingo.

Será verdad o será mentira, no lo sabemos, lo que si es un hecho es que este deporte, de esta liga, es el número uno entre la afición de Estados Unidos. Podrán decir lo que quieran los aficionados o amantes a otros deportes fuera del futbol americano, pero la realidad es que ninguna Liga deportiva del mundo se le acerca al nivel de paridad y emoción que brinda actualmente la NFL.

No es gratuito que en las tres semanas que lleva la naciente campaña se hayan definido juegos hasta el último minuto en cada una de las semanas que se han jugado.

Y aunque es algo que siempre ha caracterizado a la NFL, hasta hace unos años esto sucedía por lo regular en los juegos de horarios estelares nocturno, ya sea lunes por la noche y posteriormente domingos por la noche, pero con mucho agrado vemos que eso se ha ido expandiendo y dichos finales cardíacos ahora también se dan hasta en los juegos matutinos y vespertinos.

Lo más fascinante de esto es que no sólo sucede con los equipos protagonistas o contendientes, sino hasta con los conjuntos que se encuentran en restructuración o reconstrucción; es una liga sin igual en donde en muchas ocasiones cualquiera le da batalla a cualquiera.

Es verdad, el juego entre San Francisco y Green Bay fue una batalla de dos franquicias grandes y con amplias posibilidades de destacar en este año, pero qué decir del predicamento en que puso Detroit al poderoso conjunto de Baltimore. Esa es la actual NFL, y por más que nos quieran vender al somnífero beisbol de la MLB como el mal llamado Rey de los Deportes, o al basquetbol de la NBA como el deporte ráfaga sin igual, la realidad es que la NFL tiene el sistema más convincente de competencia de entre todas las ligas.

En el beisbol y el basquetbol hay que fletarse toda una serie de varios juegos, es decir, ver a los mismos rivales enfrentarse en varias ocasiones, algo que, aunque no se acepte, cae en la monotonía

En el futbol, sus interminables torneos y Ligas en donde sólo tres o cuatro equipos   son los contendientes de siempre; de ahí en fuera meros personajes de relleno. Esa es la verdad y no podrán negar que así es.

FENÓMENOS

Para llegar a esa calidad de espectáculo vaya que se requieren jugadores que sobrepasan el promedio de talento de los demás, y ahí tenemos lo que hicieron Justin Tucker, pateador de Baltimore, imponiendo un nuevo récord con el gol de campo más largo de la historia (66 yardas) para derrotar a un sorprendente Detroit que estuvo a segundos de dar la campanada de la temporada.

Por su parte, qué agregar a la épica actuación de cierre de Aaron Rodgers, mariscal de Green Bay, para sacarle el juego a San Francisco con sólo 37 segundos en el reloj.

Sólo la NFL nos da esa clase de momentos, y aunque es cierto que cada deporte tiene sus semidioses, los que habitan en la NFL parecieran sacados de un historieta aparte, donde alguien escribe un buen guion y no sólo una escena de acción.

Y ya que hablamos de fueras de serie, no podemos pasar por alto el nacimiento de una muy prometedora, se trata de Justin Herbert, el quarterback de los Cargadores de Los Angeles, quien desde su año de novato, la temporada anterior, ya daba muestras de su potencial. Pues bien, este domingo lo demostró al derrotar a los Jefes de Kansas City con cuatro pases de anotación.

El cambio de los Cargadores de ser un equipo de media tabla a un contendiente real se debe a este jugador, que aunque nadie lo crea fue ignorado por los Delfines de Miami hace un año en Draft de 2020.

Miami, sediento de una mariscal franquicia, prefirió llevarse a Tua Tagovailoa de Alabama, quien no ha podido asentarse en la Liga, caso contrario a Herbert, a quien quizá no voltearon a ver debido a su último juego como colegial con una actuación muy pobre en la ofensiva de Oregón que le costó perder el título nacional de la NCAA.

Sin embargo, vaya caprichos del destino, hoy Herbert es toda una realidad y promesa real para Los Angeles y la NFL, mientras que Tagovailoa podría costarle la cabeza al entrenador Brian Flores en Miami, y hasta a su gerente general.

DE MORBO

Para finalizar, no podemos pasar por alto el juego de domingo por la noche de la semana 4, Tampa Bay en Nueva Inglaterra. Si, Tom Brady frente a Bill Belichick. Se diga lo que se diga, se argumente lo que se argumente, eso es más que un juego para ambos, es una cuestión de honor.

A pesar de que en el papel los Bucaneros lucen como favoritos ante unos Patriotas en reconstrucción, que además tienen a un quarterback novato en la persona de Mac Jones, no podemos ignorar la genialidad defensiva de Belichick, quien seguramente se lucirá en estrategias para tratar de frenar a Brady; después de todo si existe alguien que lo conoce es Belichik tras haberlo entrenado por 20 años.