Los programas sectoriales relacionados con importaciones y exportaciones “se volvieron como el niño malcriado que, de adulto, se hace malhechor”, aseguró en entrevista con Crónica Raquel Buenrostro, jefa del Servicio de Administración Tributaria (SAT).

Adelantó a este diario: “2021 será el año para limpiar el comercio exterior”. Por eso, el gobierno federal alista ya modificaciones legales y jurídicas encaminadas a sancionar a operadores del contrabando y la evasión de impuestos, pero “sin restar certeza jurídica a quienes se portan bien”.

La dependencia ha detectado hasta el “uso de documentos falsos” en el traslado de mercancías y procesos de devolución fiscal…

Durante los últimos días, este diario ha ventilado irregularidades en programas como IMMEX, el cual permite la importación temporal de bienes con la excusa de transformarlos y luego devolverlos al lugar de origen, sin cubrir impuestos y cuotas compensatorias; en realidad, se internan al país productos terminados para el mercado negro e incluso para el formal, vía facturas falsas.

También se denunciaron otras anomalías, responsabilidad directa del SAT: la renta de patentes de agentes aduanales para el trasiego ilícito. Y la certificación de supuestos proveedores de insumos, llamados Operadores Económicos Autorizados (OEA´s), los cuales tienen permiso para introducir productos con escasa supervisión y todas las facilidades posibles en el despacho aduanero; aprovechándose de eso, algunos falsean cantidades para burlar impuestos.

Sobre estos tópicos se charló con Buenrostro, considerada figura clave de la 4T en la batalla contra corruptelas…

“Así como en este 2020 la estrategia más importante del SAT ha girado en torno a los grandes contribuyentes, en 2021 lo más fuerte será el saneamiento del comercio exterior, y ahí entrarán los OEA, los agentes aduanales, todos los mecanismos para el registro de exportadores e importadores, y la supervisión post despacho”.

-¿Seguimiento después de las aduanas?

-Sí, porque en las aduanas se da el despacho aduanero, pero hay veces que los contrabandistas y evasores de impuestos se nos cuelan por ahí, y ya estamos pensando en agarrarlos en procesos más adelante, en el post despacho.

-En la industria del calzado, por ejemplo, me compartían cómo los OEA reportan 3 mil pares de zapatos, pero en realidad meten 7 u 8 mil, y no pagan impuestos…

-Sí hay una urgencia por fortalecer la vigilancia del comercio exterior. Será prioridad para el próximo año, ya se están alistando los programas de trabajo.

-¿Por qué si hay tantos flancos oscuros en estos Operadores, el gobierno federal ha seguido la política de incrementarlos?

-Desconozco el crecimiento de esta figura durante la presente administración.

-Pasaron de 611 en diciembre de 2018 a 652 en octubre de 2020…

-Ha pasado lo mismo en otros padrones o registros como el de importadores, el de beneficiarios de la frontera norte o el de donatarias. El SAT venía trabajando de una mala manera: una vez que se daba alguna certificación, permiso o beneficio a alguna empresa, operador o agencia, jamás volvía a ser revisado. Estos programas se volvieron como el niño al que no educas ni le llamas la atención, como al niño malcriado que, de adulto, se hace malhechor o patán. Tenemos áreas que no han sido revisadas en 10 o 15 años y se fueron descomponiendo.

-¿Qué se hará entonces?

-El problema es que no tenemos los mecanismos legales para limitarlos y sancionarlos. Por eso, estamos trabajando ya en modificaciones a las reglas de carácter general en comercio exterior y hasta en iniciativas para reformar las leyes, con el propósito de tener mayor vigilancia. En muchos casos sabemos cuáles se portan mal, pero no hay instrumentos para anularlas. Algunas empresas ya están registradas y solicitan automáticamente su devolución de impuestos, por ejemplo. Otras tienen clasificaciones A, AA, AAA y lo mismo. Hay casos en los que tenemos 5 días para devolver el IVA y no hay una posibilidad real de hacer una revisión técnica adecuada. Con tiempo, hemos documentado otras anomalías.

-¿Cómo cuáles?

-Hay mucha documentación falsa, por los tiempos y privilegios que permiten normas y reglas no tenemos posibilidad de actuar legalmente. Si no hay las herramientas jurídicas suficientes, lo que queremos primero es dejar muy claras las reglas del juego y dar certeza jurídica a los empresarios que sí se están portándose bien, no vamos a restarles certidumbre, que no tengan ellos ningún problema o se vayan en el mismo costal de los otros.

-Hay oficios de diversos sectores industriales en los cuales han solicitado a los gobiernos en turno se dé a conocer quiénes son los beneficiarios de estos programas viciados, en específico quiénes son los OEA que pueden pasar de todo. Siempre se les ha negado. ¿Este gobierno los transparentará?

-Sí lo tenemos contemplado, porque una característica de este gobierno es la transparencia. Por eso 2021 representará un gran desafío: limpiar todo el engranaje del comercio exterior.

-¿Qué hay de los agentes aduanales que rentan sus patentes a contrabandistas?

-También están incluidos en la limpieza. Vamos a hacer revisiones, supervisiones y auditorías cuando corresponda, dentro del marco de la ley. Se les revisará para darlos de baja y si se requieren hacer modificaciones a la ley para dar certeza de cuándo se dan de baja o no, de cuándo se dan o no las autorizaciones, se harán.

Según la jefa del SAT, la lucha contra la corrupción en Aduanas y en las actividades de comercio exterior, “es tema de seguridad nacional, porque el personal se juega la vida, pero con independencia de eso, no claudicaremos”.

-El contrabando técnico y bronco está erosionando a los textileros, a los del sector calzado, automotriz, papelero, electrónico y otros -se le comenta.

-Ya hemos tenido reuniones con las Cámaras y con las agencias, me ha acompañado el Administrador General de Aduanas, estamos recibiendo todas las denuncias, porque la política es de puertas abiertas y cooperación, somos los principales interesados en abatir la corrupción, pero de fondo.