Pumas CU continúa con su domino al llevarse el “Clásico” ante Águilas Blancas por marcador de 28-7, en juego en el que Félix Buendía planteó un esquema versátil para ganar en la jornada 1 de la Liga Mayor de ONEFA.

Tras los honores a la bandera, la cual se extendió en la grama del Estadio de la Ciudad de los Deportes, ambos equipos se presentaron a su afición y comenzó la batalla por la gallardía y pasión.

Águilas Blancas con la misión del imperio guinda y Pumas CU por la supremacía en el emparrillado y, desde luego, sobre su rival en turno.

Un primer cuarto en el que Pumas CU comenzó a tomar el control de las acciones y el poder ofensivo se mostró en el césped. Unos politécnicos aferrados a romper con esa valla para abrir el marcador.

El primer cuarto cerrado y con apariciones momentáneas de llegar a la zona de anotación por parte de los universitarios. La fórmula de Félix Buendía se puso en duda para llegar con mejor claridad y fue hasta el segundo cuarto cuando se hizo efecto.

Marco Durán y Eduardo Marino penetraron la zona baja con facilidad para estar en territorio guinda. Óscar Villagrán con acarreó de cuatro yardas abrió el marcador con senda jugada ofensiva. Germán Malenche también participó para el 6-0 más el extra para el 7-0.

Para la segunda parte del cotejo, Águilas Blancas trató de abrir la defensa y aproximaciones para llegar a la igualada. Sin embargo, no pudo encontrar la llave para abrir el cerco azul y oro.

El 13-0 (14-0 extra) se presentó en el tercer cuarto. Durán envió pase de anotación y tener a los universitarios con el triunfo momentáneo del “Clásico” de ONEFA en momento de lluvia.

Águilas no levantó su vuelo y con dificultades enfrentó el embate de los Pumas que trabajaron a su antojo ambas zonas. El 21-0 llegó en el cuarto periodo ya con un dominio absoluto. Marco Durán conectó con Ricardo Sainz y Malanche, quien estiró el brazo para anotar en una buena jugada.

Los universitarios cerraron sus filas y con el tiempo a su favor dispusieron de llevar el ovoide vía terrestre ante la desesperada zona guinda. En coach Enrique Zárate no vio por donde llegar a la franca anotación para no llevarse el cero.

La pizarra y el tiempo, otro de los rivales de Águilas, que se desconectó de su ofensiva y permitió siete puntos para para el 28-0. De nuevo la dupla Daniel Dejuambelz-Malanche hizo efecto.

El cero lo rompió Águilas vía Mauricio García, pero el tiempo no alcanzó porque el reloj tenía sólo cinco minutos para la conclusión. Al final Pumas se llevó el triunfo.

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