En La reina no es, Guillermo Arreola resume 15 años de trabajo: “más que una retrospectiva es una selección de artista. Entre las piezas que ahora se exhiben hay una que lleva el mismo nombre de la exposición, y eso para mí es muy emblemático porque mi propio trabajo representa el paso de una forma de pintar a otra, sin que haya una renuncia absoluta a lo anterior. Estrictamente, tiene que ver con el paso de lo abstracto a lo figurativo”, comenta el artista.

Esta exposición conformada por 34 obras de distintos formatos, exhibe también los videos ¿Has visto la sombra del humo? y Conjuros. Se puede visitar en la Celda Contemporánea de la Universidad del Claustro de Sor Juana, los martes y jueves, de 12:00 a 17:00 horas, hasta el mes de agosto.

En conversación con Crónica, Arreola cuenta que le hubiera gustado incorporar piezas de los años 2005-2008, “está restringida porque trabajé solamente con el acervo que está en mi poder, en sentido de retrospectiva hubiera querido integrar otras piezas que no están conmigo ya”.

La obra de gran formato a la que el título hace referencia está fechada en 2013. El pintor considera que era el punto medio –“entre el antes y el después”- de diferentes planteamientos sobre el manejo del espacio en las superficies pictóricas, cómo acoplar una imagen acabada con un título, así como el impacto de la decisión de nombrarla, pues opina que los títulos de las obras son fundamentales.

Si bien la apuesta del artista es que cada pieza sea única –“rehúyo de la repetición y de la reproducción”-, consiente que la mayoría comparte ciertos motivos de atmósferas, como la alusión a lo ominoso, el revestimiento de la imagen con una especie de bruma o película neblinosa, y el elemento dramático.

Sobre el material audiovisual que se exhibe, el artista explica que los dos videos entran de forma natural como parte de su labor plástica porque no tienen la intención de contar una historia sino de recrear las atmósferas que ya aparecen en sus pinturas, solo que en movimiento.

“Están concebidas como pinturas en movimiento. Como soporte es el video, pero mi intención es poner en movimiento imágenes que en principio me sugerían composiciones plásticas”, apunta.

En Conjuros hay una colaboración con la poeta Pura López Colomé, que consiste en la lectura de un poema. Ese video muestra el proceso de elaboración de algunas pinturas y trata de encontrar los paralelismos en lo que la pintura tiene que ver con lo literario o poético.

Por otro lado, ¿Has visto la sombra del humo? se concibe como un pequeño concentrado en formato de video de lo que ha sido la obra plástica de Arreola. Está compuesto sobre todo de imágenes paisajísticas, un paisaje marino y aneblinado, que son algunos de los elementos de su propio quehacer artístico. “Aunque no sean las pinturas que ya había elaborado propiamente. Es una forma de resumir, sintetizar. No descartaría que esos videos, próximamente, yo los estuviera viendo, pusiera una pausa y recreara alguna de esas imágenes”, agrega el pintor.

ACTUALMENTE. Guillermo Arreola piensa que se encuentra más cercano a los planteamientos figurativos sobre el espacio y uso del color, así como a la incorporación de la figura humana, y señala que el tránsito de lo abstracto fue natural, pues ya había agotado en la abstracción todo lo que quería plantear.

“Quería pasar a otras posibilidades de mi propia percepción. Definitivamente, en lo figurativo hay una mayor noción de realidad -aunque para cada quien una cosa distinta la mayoría de las veces-. La pintura abstracta la identifico con lo intelectual, mientras que pasar a lo figurativo lo identifico con algo más orgánico o corporal”, concluye.