El presidente estadunidense, Donald Trump, aseguró ayer que “nunca” trabajó “para Rusia”, en respuesta a la información aparecida el fin de semana acerca de que el FBI abrió una investigación para saber si el republicano empezó a colaborar “secretamente” con Moscú, después de que despidiera al entonces director de ese cuerpo de inteligencia, James Comey.

“No sólo nunca trabajé para Rusia, creo que es una desgracia que siquiera hagan esas preguntas porque es todo un gran y enorme fraude”, regañó el republicano a los periodistas, que querían comentar la información revelada por el diario The New York Times.

De acuerdo con el rotativo, los integrantes de la cúpula del FBI “se preocuparon tanto por el comportamiento del presidente que comenzaron a investigar si había estado trabajando en nombre de Rusia contra los intereses estadunidenses”.

Amenaza nacional. La investigación secreta del FBI quería determinar si las acciones de Trump constituían una posible amenaza para la seguridad nacional de EU e intentaron determinar si el mandatario estaba trabajando a sabiendas para Moscú o si, sin saberlo, había caído bajo su influencia.

Mientras tanto, el nominado por Trump a fiscal general de EU, William Barr, dijo ayer que permitirá que el fiscal Mueller concluya la investigación sobre la supuesta coordinación entre la campaña de Trump y Rusia durante las elecciones de 2016.