El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, afirmó este lunes que el robo de combustibles ha caído 65 % desde que inició su combate frontal a esta problemática con el cambio en el modelo de suministro de Petróleos Mexicanos (Pemex) y el aumento de la vigilancia en ductos.

"Hay un 65 % menos de robo de hidrocarburos. En dinero, es un poco más de 5.000 millones de pesos (unos 264 millones de dólares)", apuntó el mandatario en su rueda de prenda matutina.

Explicó que el reforzamiento de la seguridad, que implica a miles de elementos de seguridad y el transporte por pipas (camiones cisterna) es más costoso, pero que incluso así se han logrado evitar pérdidas.

López Obrador explicó que aunque se siguen "robando pipas", el volumen es mucho menor.

Y en definitiva, se sigue enfrentando el robo de combustibles en ductos, y aseguró que se ha logrado ya regularizar el servicio en buena parte del país.

No obstante, reconoció que todavía hay problemas en el occidental estado de Jalisco, en Monterrey (Nuevo León), y Guanajuato.

"La gente está muy esperanzada del cambio y nos dicen que no aflojemos, ni un paso atrás en el combate a la corrupción y a la impunidad porque esto es lo que quiere el pueblo de México", resaltó el mandatario.