Después de 50 años, la Prelatura de Cancún-Chetumal, creada por Paulo VI el 23 de mayo de 1970, fue elevada a rango de diócesis por el papa Francisco, este 15 de febrero de 2020, designando como su primer obispo al sacerdote Legionario de Cristo, Pedro Pablo Elizondo Cárdenas.

Con esta designación, la Conferencia del Episcopado Mexicano queda formada por 98 diócesis, de las cuales 19 son arquidiócesis, 73 diócesis, cuatro prelaturas y dos eparquías de rito oriental.

La nueva diócesis, que desde su inicio fue entregada a los Legionarios de Cristo, y cuyo primer Administrador Apostólico fue el padre Jorge Bernal Vargas, tiene un territorio de poco más de 50 mil kilómetros cuadrados, y una población de un millón 352 mil personas, de la cual el 68.3 % es católica, aunque debido a la importancia turística de la zona, es elevado el número de personas que temporalmente en ella residen. El 82.5 % de la población habita en zonas urbana y el resto, en la rural; gran parte de ellos han sido migrantes de la Ciudad de México y de los estados vecinos que han llegado desde los últimos 15 años.

Monseñor Jorge Bernal Vargas recibió la ordenación episcopal el 19 de marzo de 1974, y se desempeñó en este cargo hasta noviembre de 2004, cuando Juan Pablo II designó a Pedro Pablo Elizondo Cárdenas como obispo de esta Prelatura, que fue separada de la Arquidiócesis de Yucatán y la parte meridional de la Diócesis de Campeche.

En lo pastoral, la evangelización corrió a cargo de los franciscanos y después de la Guerra de Castas, por sacerdotes diocesanos. Con el papa Francisco prevalece la idea de una iglesia misionera y de salida, que tiene preferencia por los pobres y marginados, y la atención de las periferias, para lo cual hay 128 sacerdotes en la nueva diócesis, entre Legionarios, franciscanos, diocesanos, mercedarios, frailes menores capuchinos, Misioneros Servidores de la Palabra y Misioneros de Cristo Resucitado, que están distribuidos en 45 parroquias, dos santuarios y más de 400 capillas, además de que hay más de 2,000 misioneros laicos.

Esta designación tiene lugar pocos días después de que fuera electo en su Capítulo General, como Superior General de los Legionarios de Cristo, el padre John Connor, de 51 años de edad, quien es el primer no mexicano en estar al frente de esta congregación religiosa que surgió en México.

Él radica en los Estados Unidos desde 2001; ha ejercido algunos cargos de gobierno eclesial en Filadelfia, Nueva York y Atlanta. Es licenciado en Administración por la Loyola University de Chicago, además de que ha vivido en Alemania; Italia, donde estudió filosofía y teología, y en donde fue ordenado el 2 de enero de 2001, y en España.

Estos nombramientos también tienen lugar luego de que la Conferencia del Episcopado Mexicano se haya pronunciado a favor de la tolerancia cero al abuso sexual de menores, mayor transparencia y mayor rigor en las leyes civiles correspondientes.

Carlos Villa Roiz