El Partido de la Revolución Democrática (PRD) lamentó que el presidente Andrés Manuel López Obrador no acudiera este viernes a la audiencia de pruebas y alegatos en el Instituto Nacional Electoral (INE) y que enviara un escrito a través de personal de la Consejería Jurídica de la Presidencia de la República.

"Al presidente le gusta la historia, hoy hubiera pasado a la historia como el primer presidente del país en haber venido al Instituto Nacional Electoral a defenderse públicamente con sus alegatos”, opinó el dirigente nacional del PRD, Ángel Ávila, quien acudió a la audiencia.

Ello luego de que la Unidad Técnica de lo Contencioso del INE citó a comparecer al Ejecutivo Federal, así como a la secretaria de Bienestar, María Luisa Albores González, y al coordinador general de Programas para el Desarrollo, Gabriel García Hernández, para responder el citatorio de la investigación contenida en el expediente UT/SCG/PE/PRD/CG/106/2019.

Dicho documento se dio luego de una queja presentada por el PRD, el 8 de agosto, por la supuesta realización de actos de promoción personalizada del presidente mediante la indumentaria y accesorios como chalecos, gorras, mochilas y gafetes durante la entrega de beneficios o programas sociales que realizan funcionarios públicos del Gobierno Federal.

En la audiencia de referencia, los mencionados, así como 32 “súper delegados”, enviaron oficios a través de representantes jurídicos donde no afirmaron ni negaron las denuncias.

“Por lo tanto pierden su oportunidad para defenderse en esta audiencia y admiten las pruebas que estamos presentando”, sostuvo el representante del PRD ante el INE, Camerino Márquez.

Ante ello, sostuvo que las mil 500 pruebas certificadas por el INE deberán concluir en un informe para que sea remitido a la Sala Especializada del Tribunal Electoral de la Federación (TEPJF) para que este órgano fije las sanciones.

En tanto, el también perredista Fernando Belaunzarán lamentó que el presidente López Obrador señalara al INE de no haber hecho nada en administraciones pasadas, pues recordó que el entonces Instituto Federal Electoral (IFE) citó a comparecer a los expresidentes Felipe Calderón y a Enrique Peña Nieto.

Los perredistas denunciaron que los llamados Servidores de la Nación son una estructura clientelar electoral que le cuesta a los mexicanos cuatro mil millones de pesos y que busca fortalecer al partido político de Morena para las elecciones de 2021.

havh