No es un secreto que para las compañías de telecomunicaciones el despliegue de antenas receptoras de señales para la telefonía móvil ha sido una carrera cuesta arriba. Como sucede con los ductos de gas natural, en algunas comunidades se ha difundido información incorrecta sobre la tecnología que necesitan estos sectores y que han hecho temer a pobladores de impactos no confirmados. Además, en los escenarios más preocupantes, los proyectos de energía y telecomunicaciones que exigen el derecho de paso por tratarse de áreas estratégicas para el desarrollo del país, han sido capturados políticamente por liderazgos malintencionados que buscan cobrar “externalidades” ilegítimas. En fin, los paros de obra para estos sectores se han transformado en retrasos en las inversiones y en problemas para los proyectos que deben generar mayor competitividad en el país. En el caso de los gasoductos, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) se enfrenta a complejos escenarios en donde el nulo avance de las canalizaciones ha generado deudas y pasivos para la compañía de energía eléctrica que debe cubrir CFE.

En el caso de las telecomunicaciones, ante problemas de supuestas oposiciones o bloqueos políticos de autoridades municipales, las torres, antenas o radio bases no se instalaron lo suficientemente rápido para que compañías como AT&T pudieran ofrecer una cobertura más amplia mientras el jugador preponderante (América Móvil) tenía la obligación de cumplir las medidas impuestas por el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) de permitir el acceso a sus antenas en operación.

A diferencia de las empresas que tenían que construir los gasoductos para proveer del gas natural a CFE (con contratos y condiciones firmadas para seguir obteniendo ingresos en el caso de paros de obra), AT&T ha tenido que asumir las consecuencias de los obstáculos que le ha colocado el jugador preponderante (barreras no formales) y, por supuesto, los problemas para instalar antenas. La noticia es que la instalación de fibra óptica está eludiendo estos escenarios y ahora se instalará a través de postes. Se trata también de un esfuerzo importante por acelerar la cobertura para los poblados más alejados del país.  Para AT&T, sin embargo, el tiempo se agota porque desde su corporativo le han impuesto un reloj de arena que ya está terminándose. En otras palabras, el avance de la tecnología siempre busca opciones y hasta los grandes corporativos tienen que aprender a moverse más rápido.

En el caso de los ducto de gas natural, el problema, sin embargo, es que no se puede transportar de otra manera que no sea vía subterránea. Al menos no si se pretende que mantenga el atractivo de sus costos bajos.

Alicia Bárcenas, de la Cepal, aseguró que México tiene un compromiso con Centroamérica: el de conectar al territorio nacional con ductos eficientes que no sólo suministren el combustible a todas las poblaciones de este país sino también a los consumidores y empresarios de El Salvador, Guatemala, Nicaragua y Honduras. Lo mismo sucede con las telecomunicaciones. México es el vínculo con esta región y allí hay grandes posibilidades de desarrollo. Por eso son importantes convenios como el que firmó la compañía American Tower con el gobierno de Omar Fayad para acelerar la instalación de infraestructura de telecomunicaciones. Otros gobernadores seguirán este modelo porque, como sucedió con Estados Unidos, no falta poco para que comencemos a ver entre estados y hasta en municipios una mayor competencia por la inversión en donde el andamiaje institucional y el respeto al estado de derecho serán claves.

Izzi y Netflix y el triunfo del consumidor.

La empresa de telecomunicaciones izzi sorprendió con el lanzamiento de nuevos paquetes de telefonía, internet de banda ancha y televisión, con lo que sin duda se coloca desde ya como la mejor opción, al incluir el acceso a Netflix. Anteriormente, ya se podía entrar a la plataforma desde izzi TV, pero con una cuenta propia; ahora ya se incluye el costo en la suscripción al paquete Unlimited. Este acuerdo, único en México, viene como parte del objetivo de izzi por agregar la mayor cantidad y calidad de contenidos en su catálogo de televisión, que a esta fecha incluye canales en vivo, opciones de VOD, 200 canales para toda la familia, blim, HBO max y Fox, y ahora, Netflix. Asimismo, los paquetes (que inician en poco más de 600 pesos), incluyen telefonía e internet de hasta 100 MB. Se trata de una superoferta como las que año con año, desde su lanzamiento, ha presentado izzi en favor de sus suscriptores.

Siemens debe responder

El caso de la ingeniera Karla Castro, que sufrió un aparatoso accidente en un proyecto en instalaciones de la firma Ternium a cargo de Siemens, nos tiene perplejos. No sólo porque la empresa se ha deslindado por completo de sus responsabilidad laborales, sino por la impunidad con la que está actuando el gigante alemán. No ha cubierto los gastos de Castro, no ha respondido en ningún aspecto y parece no importarle el juicio de la opinión pública. Siemens, en cambio, no ha dudado en demandar a cualquiera, cliente o socio, cuando siente que sus derechos han sido vulnerados. Siemens, en los tiempos de la corrupción gubernamental y judicial, le ganó a Pemex una demanda por 500 millones de dólares en el caso de Conproca. Quizás ahora piensa que puede vulnerar los derechos de una trabajadora sin consecuencia alguna. No estaría nada mal que la titular de la Secretaría del Trabajo, Luisa María Alcalde, revise cuál es la situación de los trabajadores de Siemens, una compañía alemana que seguramente no se comportaría así en su país.

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