Metrópoli

Tráfico cuesta a capitalinos $47 mil millones anuales

Un estudio realizado por el Imco y Sin Tráfico establece que entre más tiempo se pase en la congestión vial, se pierde más dinero en oportunidad de ingreso, debido a que no se puede trabajar

Un estudio realizado por el Imco y Sin Tráfico establece que entre más tiempo se pase en la congestión vial, se pierde más dinero en oportunidad de ingreso, debido a que no se puede trabajar

Tráfico cuesta a capitalinos  $47 mil millones anuales

Tráfico cuesta a capitalinos $47 mil millones anuales

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Un estudio del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) y la organización Sin Tráfico, establece que a los capitalinos les cuesta 47 mil millones de pesos el tráfico en la Ciudad de México.

En el informe: El costo de la congestión: vida y recursos perdidos, se analizaron 32 de las principales ciudades del país, entre ellas la CDMX, Monterrey y Guadalajara, para encontrar que anualmente el tránsito cuesta 94 mil millones.

El Imco explicó que, de continuar con las mismas políticas públicas e inversión en infraestructura vial, la cual privilegia el uso de vehículos sobre el transporte público, “las condiciones podrían agravarse a corto plazo”.

“La apuesta por el automóvil ha traído un fuerte crecimiento de vehículos, 5.3% más por año, lo cual aumenta la congestión y dificulta la movilidad, lo que beneficia más a las familias con mayores ingresos, ya que la población con menores recursos no es propietaria de un auto”, cita el documento.

Asimismo, explica que los capitalinos que se mueven en transporte público pierden 20 días al año en estos traslados, mientras que quienes circulan en automóvil particular pierden 16 días en sus trayectos, lo cual contribuye a la desigualdad social.

En términos de tiempo, el costo de la congestión es de 100 horas anuales promedio por persona: los usuarios del transporte público pierden 118 horas al año, mientras que quienes usan automóvil pierden 71 horas.

Además de perder el tiempo en el tráfico, una persona pierde más de cinco mil pesos al año, puesto que pudo haber trabajado más horas o descansar, acudir a otras actividades o disfrutar más tiempo con la familia o disfrutar de más esparcimiento.

El estudio se realizó tras mapear cómo se mueven las personas a diario, de acuerdo a encuestas intercensales, estudiar miles de millones de viajes para cuantificar el tiempo extra que pasa la población trasladándose de un lugar a otro y con ello calcular el costo anual en las 32 ciudades analizadas.

Además se identificaron los viajes de transporte público y privado que son afectados por el congestionamiento vial para con ello cuantificar el tiempo que las personas pierden.

El costo de la congestión: vida y recursos perdidos, el primer estudio de este tipo en México, se realizó gracias al big data que por medio de sensores recolecta información sobre condiciones de tráfico vehicular en tiempo real y el impacto social y económico de la congestión en las 32 ciudades de mayor actividad económica en el País.

Por otra parte, se encontró que a pesar de que la mayoría de las personas utilizan transporte público o caminan, la mayor parte del presupuesto asignado a movilidad (47%) está destinado a los automóviles y solo el 1.2% corresponde al mejoramiento del transporte público, explican las organizaciones.

Las ciudades del país más afectadas por el costo total de la concesión vial son la CDMX, con 47 mil 043 millones 636 mil pesos; Monterrey, con 9 mil 839 millones 242 mil pesos; Guadalajara, con 8 mil 067 millones 515 mil pesos; Puebla-Tlaxcala, con 4 mil 453 millones 805 mil pesos; y Tijuana, 2 mil 774 millones 592 mil pesos.

Mientras que las urbes en las que se pierde más tiempo por persona en el tráfico son el Valle de México (146.5), Toluca (116.07), Puebla-Tlaxcala (114.18), Monterrey (113.36) y Acapulco (112.98).

Por ello, el Imco y Sin Tráfico recomendaron a los gobiernos, tanto locales como al federal, invertir en transporte público para hacerlo mucho más seguro, eficiente y limpio, así como en infraestructura para movilidad no motorizada y resaltaron que se debe buscar que el transporte público sea financieramente sostenible para fomentar la evolución a ciudades con sistemas de información que permitan la multimodalidad en traslados y desincentivar el uso del automóvil con impuestos verdes.