El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, duramente criticado por abandonar a su suerte a las milicias kurdosirias, aliadas de EU en su lucha contra el Estado Islámico, anunció ayer que autorizó al departamento del Tesoro a imponer “sanciones nuevas muy significativas” a Turquía.

El secretario del Tesoro, Steve Mnuchin, agregó que pueden “paralizar la economía turca” si fuera necesario. Esto, para forzar al gobierno de Recep Tayyip Erdogan a detener su ofensiva en el norte de Siria contra las citadas milicias.

Sin embargo, Erdogan alertó ayer en un discurso televisado durante un acto político que “digan lo digan, no vamos a detener nuestra marcha”.

ATAQUE DIRECTO. Para agregar tensión entre los dos países, anoche el Pentágono informó que artillería turca atacó a soldados de Estados Unidos a las afueras de la ciudad de Kobane, aunque matizó que no hubo muertos.

100 MIL DESPLAZADOS. Naciones Unidas alertó ayer que en tres días la ofensiva turca ya ha obligado a 100 mil personas a abandonar su hogar, y pidió abrir un corredor humanitario, porque otras 650 mil personas necesitan ayuda urgente.

Finalmente, la invasión turca ha provocado ya la muerte de 31 civiles, entre ellos, varios menores.