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Trump se desmarca de la ley antiaborto de Alabama

Defiende la práctica en el caso de violación, incesto o peligro de muerte para la gestante, pero remarca que él es “fuertemente pro vida”

Defiende la práctica en el caso de violación, incesto o peligro de muerte para la gestante, pero remarca que él es “fuertemente pro vida”

Trump se desmarca de la  ley antiaborto de Alabama

Trump se desmarca de la ley antiaborto de Alabama

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se posicionó en la polémica suscitada por la aprobación de una ley que prohíbe el Aborto en el estado de Alabama, la semana pasada, y dejó entrever que la ley, que castiga hasta con 99 años a los médicos que practiquen un aborto, podría haber llegado muy lejos.

En una serie de tuits, apuntó a que él es “pro vida, con tres excepciones: violación, incesto o si existe riesgo para la madre”. El mandatario republicano hacía así alusión a que la reciente ley aprobada en Alabama prohíbe el aborto en los casos de violación e incesto, manteniendo como único atenuante para interrumpir el embarazo el posible riesgo para la vida de la mujer.

Atrás quedó el Trump “pro elección”, como se definió en una entrevista en 1999. “Odio el concepto de aborto. Lo odio. Odio todo lo que representa. Me estremezco cuando escucho a la gente debatir sobre el tema. Pero aun así, sólo creo en la elección”, dijo, en defensa del derecho de la mujer a decidir. Sin embargo, el antes empresario ahora es presidente populista y concentra todos sus esfuerzos en reelegirse en 2020, por lo que su discurso ha cambiado radicalmente: “La izquierda radical (como suele llamar a los demócratas), con su apuesta por el aborto tardío, está implosionando en este tema. Debemos mantenernos unidos y ganar por (el derecho a la vida) en 2020. Si somos tontos y no nos mantenemos UNIDOS como uno solo, ¡todas nuestras luchas por la vida pueden desaparecer rápidamente. ¡Y lo harán!”, proclamó en Twitter.

Lo que pretende la normativa aprobada en Alabama, como las leyes hermanas recientemente admitidas en Kentucky, Missouri o Georgia, es desafiar la sentencia de 1973 —conocida como Roe versus Wade—, en la que la Corte Suprema estableció que el aborto es un derecho constitucional protegido por la enmienda 14 de la Carta Magna.

Que se pronuncie la Corte. Sin embargo, los promotores del proyecto son conscientes de que la ley no entrará por ahora en vigor, ya que contradice ese histórico fallo de la máxima corte.

”Al menos a corto plazo, esta ley también será inaplicable”, dijo en un comunicado la gobernadora de Alabama, tras ratificar la ley del Senado estatal.

Pero añadió que “es hora de que la Corte Suprema examine, una vez más, este importante asunto, y creen que esto (la aprobación de la nueva norma) puede provocar la mejor oportunidad para que ocurra”, concluyó la gobernadora.

En contraste a estas medidas legislativas restrictivas, los Estados más progresistas están pasando leyes para proteger el derecho al aborto. El presidente ha vapuleado públicamente la ley aprobada en Nueva York, que permite ­interrumpir un embarazo hasta la semana 24 de gestación o más, si el feto es inviable o la vida de la madre corre peligro.