Algunos verificentros de la Ciudad de México presentaron ayer problemas en su sistema y no pudieron reiniciar las pruebas ambientales necesarias para que los automovilistas obtengan un holograma para poder circular.

El pasado 2 de enero se informó que el equipo tecnológico recibiría mantenimiento, por lo que los centros se mantendrían cerrados hasta el domingo.

Estimaciones matutinas de la Secretaría de Medio Ambiente de la CDMX (Sedema) indicaron que la mitad de los centros ayer presentó inconvenientes.

Por la noche, a través de su Dirección General de Gestión de la Calidad del Aire, la Sedema informó que debido a la implementación de las nuevas políticas de evaluación de las pruebas de verificación vehicular, fue necesario actualizar los registros y la programación de la base de datos del Sistema de Verificación Vehicular, que se distribuye a los centros de verificación mediante enlaces de red privada virtual, contratados por dichos centros de acuerdo a las especificaciones de esta Secretaría.

Sin embargo, dijo, se detectó que estos enlaces no proporcionaron la calidad necesaria para transmitir la actualización de forma eficiente, por lo que se retrasó el funcionamiento de los centros de verificación autorizados para operar en la Ciudad de México.

La Sedema explicó que hasta las 17:00 horas se reportaron 30 de los 55 centros en operación e indicó que continuaban abriendo entre cuatro y cinco centros por hora.

El director en la Gestión de la Calidad del Aire CDMX, Sergio Zirath Hernández, comentó que los cierres no deben alarmar a los propietarios de vehículos, ya que tales lugares esperan la actualización de software para volver a su funcionamiento habitual.

Zirath aclaró que el retraso se debió a la inestabilidad en la banda ancha con la cuentan algunos verificentros y confió en que, en un par de horas, los centros de verificación cerrados volverían a su funcionamiento.

El funcionario contó que el software que se instala permitirá brindar mejores resultados a fin de tener un mayor control de los autos que seguirán circulando en la Ciudad.

Al ser cuestionado sobre sus expectativas con la nueva administración, aseguró que se dará una mayor atención a las denuncias con respecto a las irregularidades que existan, así como a la nula aprobación hacia los actos que sean de corrupción.

Detalló que uno de los primeros cambios en la nueva será buscar que los procesos para los conductores sean más simples y directos.

Explicó que la problemática de movilidad y el ozono han propiciado las afectaciones ambientales en la capital.

Ayer, uno de los verificentros sin servicio fue el BJ27 ubicado en la Alcaldía de Benito Juárez, en el que los usuarios mostraron molestia, pues fueron reprogramados.