Opinión

Viviendo en la inseguridad

Viviendo en la inseguridad

Viviendo en la inseguridad

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy
GOBERNADORAS Y GOBERNADORES, DE LOS ESTADOS Y DE LA CDMX:+La delincuencia y la mala vida son la medida del fracaso de un Estado

H. G. Wells

Les tengo dos noticias: una buena y otra mala.

La buena es que la incidencia delictiva en el país disminuyó 4.7 puntos porcentuales y el número de víctimas por cada 100 mil habitantes bajó 12 por ciento.

La mala noticia es la comisión de 30 millones de delitos que  afectaron a 21 millones de nuestros compatriotas.

Éstos son algunos de los muchos datos deprimentes arrojados por la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción de Seguridad Pública (ENVIPE). El estudio fue realizado por el INEGI en poco más de cien mil hogares,  durante el año 2020, para medir los hechos delictuosos acumulados en el 2019.

Lamento mucho, señores gobernadores, estar hablándoles de un promedio de 82 mil 191 hechos delictuosos diarios, ocurridos a lo largo y lo ancho de los territorios de los estados que, como quiera que sea (diría AMLO…), ustedes dicen gobernar…  Las cifras no son las “oficiales" que nos cuenta el gobierno, sino las que dice reales, las que ha sufrido la gente.

Según la ENVIPE, el delito más frecuente es el robo en transporte público con ¡8.2 millones de asaltos cotidianos! y el agravante de que agrede a nuestra gente más pobre…

El segundo delito más recurrente es la extorsión (15 por ciento), que alcanzó 4.6 millones, cometido en su inmensa mayoría por la vía telefónica. Y aunque hace dos años hubo una disminución en este segmento al 22 por ciento, el problema es que implica una organización y, como ya vimos en Salamanca, puede escalar a asesinato.

Un delito que en lo personal considero el más agresivo es el secuestro. En 2019 hubo 105 mil víctimas retenidas contra su voluntad y la mayoría de los casos fue secuestro exprés, pero el stress post traumático a ver quién se lo quita a las víctimas y sus familias.

Pese a que los delitos disminuyeron en 2019 con respecto al año anterior, la violencia no amaina… Cuando la víctima está presente durante el delito, la agresión es prácticamente segura; incluido el uso de armas, según declararon los encuestados por la ENVIPE.

La gran mayoría de las trasgresiones (93 por ciento) no son denunciadas por causas del todo conocidas: pérdida de tiempo, desconfianza en la autoridad, miedo, etc. Eso nos lleva a que solo siete por ciento de los delitos fueron denunciados, pero los Ministerios Públicos estatales solamente abrieron carpeta de investigación en dos terceras partes, es decir 4.7 por ciento de las transgresiones cometidas.

Y aunque ha habido una cierta mejoría, el resultado final es que la mitad de esas poquitas carpetas de investigación llegan a… nada. No pasó nada…

No es de extrañar, pues, que para los encuestados, el principal problema que les aqueja es la inseguridad (68 por ciento), casi el doble que la salud y el desempleo. Así es por la sencilla razón de que la delincuencia nos ha obligado a cambiar nuestros patrones de vida y nos mantiene en alerta permanente.

Los hijos menores ya casi no salen a la calle (62 por ciento), la gente no usa joyas (55) y no sale de noche (50 por ciento). La población se siente vulnerable en cualquier sitio público, lo mismo en el cajero automático (83 por ciento) que en la calle y, por supuesto, en el transporte público (73 por ciento cada uno).  ¿Cómo evitar cualquier sitio de éstos..?

Estas cifras, señores gobernadores, son una verdadera vergüenza para las fiscalías estatales, los ministerios públicos y las policías locales. No en balde tales instituciones despiertan tan poca confianza en la ciudadanía, tanto por deficiencia como por corrupción.

El chistecito de la inseguridad ha costado a los hogares mexicanos la friolera de 277 mil millones de pesos el año antepasado, equivalentes a 1.85 puntos del PIB, como quieran ustedes  verlo.

Y por favor, no me digan que la situación así ya estaba dando cuando ustedes llegaron.             Eso ni al presidente le queda.

Como alguna vez dijo don Alejandro Martí: si no pueden, renuncien.Investigación: Upa Ruiz upa@delfos.com.mxInternet: Lmendivil2010@gmail.comFacebook: Leopoldo MendívilTwitter: @Lmendivil2015Blog: leopoldomendivil.com