Este lunes 22 de abril, alrededor de mil millones de personas, en 190 países, celebrarán el Día de la Tierra, en torno al lema “El planeta contra los plásticos”. El movimiento busca crear conciencia sobre los impactos negativos a la salud y a los ecosistemas que están provocando los plásticos; principalmente por la práctica de arrojarlos al medio ambiente sin control, donde permanecen décadas sin degradarse o se desintegran paulatinamente hasta convertirse en hojuelas o microplásticos que ensucian los suelos y mares.

México se une a esta acción colectiva global, a través de cientos de actividades académicas y sociales, encabezadas principalmente por la sociedad civil y por instituciones académicas, las cuales se reportan en diferentes plataformas, como https://cartadelatierra.org/celebraciones-del-dia-de-la-tierra-en-mexico/

En 2024, uno lo mensajes centrales que los activistas buscan comunicar a la población es que es necesaria una acción conjunta de sociedad, industria y gobiernos para que se logre una reducción de 60 por ciento en la producción de plásticos para el año 2024.

Adicionalmente, este año el Día Mundial de la Tierra, enfocado al combate a la producción de más plásticos, se conmemorará un día antes de que inicie, en Canadá, una reunión multilateral de siete días en la que se estará negociando el Tratado Mundial de las Naciones Unidas sobre el Plástico, que es un proceso que ha estado en marcha desde antes de la pandemia de COVID19 y ahora está entrando en sus fases finales.

MILLONES DE TONELADAS

De acuerdo con el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, la humanidad produce y desecha más de 430 millones de toneladas de plástico cada año, dos tercios de las cuales son productos de vida corta que en poco tiempo se convierten en desechos, que inundan los océanos y, a menudo, invaden la cadena alimentaria humana.

"Muchas personas no son conscientes de que un material que está arraigado en nuestra vida cotidiana es capaz de tener un impacto tan significativo no sólo en la vida silvestre, sino también en el clima y en la salud humana", afirma Llorenç Milà i Canals, responsable de la Iniciativa del Ciclo de Vida del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).

RUTA DE ACCIÓN

En 2022, los Estados Miembros de las Naciones Unidas acordaron una resolución para acabar con la contaminación por plásticos. Un Comité Intergubernamental de Negociación está elaborando un instrumento jurídicamente vinculante sobre la contaminación por plásticos, con el objetivo de tenerlo terminado a finales de 2024.

Las conversaciones se han centrado en medidas que tengan en cuenta todo el ciclo de vida de los plásticos, desde la extracción y el diseño de los productos hasta la producción y la gestión de los residuos, lo que brinda la oportunidad de diseñar los residuos antes de que se generen, como parte de una próspera economía circular.

Además del trabajo a nivel de gobiernos y leyes, el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) también pone mucho énfasis en la responsabilidad que tiene cada persona para encarar esta crisis.

“Las decisiones individuales sí pueden marcar la diferencia. Por ejemplo, la ciudadanía puede cambiar sus hábitos de consumo para evitar los productos de plástico de un solo uso siempre que sea posible. Si los productos de plástico son inevitables, deben reciclarse o reutilizarse hasta que ya no puedan usarse, momento en el que deben reciclarse o eliminarse adecuadamente. Llevar bolsas al supermercado y, si es posible, esforzarse por comprar alimentos de origen local y de temporada que requieran menos envoltorios o empaquetado plástico y transporte”, indica el PNUMA en sus diagnósticos sobre la crisis de plásticos.

El PNUMA ha elaborado guías y recomendaciones especiales para gobiernos, empresas y ciudadanos, de forma que cada participante pueda aprender algunas acciones sencillas que podría adoptar para ayudar a frenar la crisis global por contaminación de plásticos. Esas guías pueden ser consultadas por cualquier persona en la siguiente dirección de internet:

https://www.worldenvironmentday.global/es/get-involved/get-solutions

También preocupa la grave degradación de los ecosistemas

Según cifras de la ONU, anualmente el mundo pierde 10 millones de hectáreas de bosques; una extensión similar a Islandia. Es vital detener este deterioro, porque los ecosistemas sanos ayudan a la humanidad a protegerse de diferentes enfermedades, debido a que la diversidad de especies hace más difícil la propagación de patógenos. Sin embargo, aproximadamente un millón de especies animales y plantas se encuentran en peligro de extinción. Además, de acuerdo con el organismo mundial cada año se pierden 24 mil millones de toneladas de suelo fértil en el planeta. En el caso de México, más de la mitad del territorio nacional presenta algún nivel de degradación, física, química o biológica.