El presidente Andrés Manuel López Obrador dedicó casi toda la mañanera a recordar los compromisos que ha cumplido desde su llegada al gobierno el 1 de diciembre de 2018, entre ellos, que ya no existe partidas para vestuario o cualquier gasto de protocolo y ceremonial dedicado al presidente, a sus colaboradores cercanos y a familiares.

Sin revelar el precio, López Obrador aseguró que él manda a hacer sus trajes con un sastre que vive en Ecatepec, Estado de México, porque ya no es lo mismo que administraciones pasadas que gastaban mucho dinero en la vestimenta.

En varias ocasiones, el mandatario mexicano ha subrayado que la felicidad no se encuentra en la ropa de marca ni los carros último modelo, porque solo siendo buenos podemos ser felices.

Recordó que se cumplió el compromiso de que ningún funcionario público puede recibir regalos cuyo valor exceda de cinco mil pesos y se evitaron los gastos innecesarios en el extranjero.