Hay tiro y además multinivel

Yo también lamento la palabra tiro empleada por tendencias políticas diferentes, es bravucona y concibe al servicio público como un pleito entre gandallas y no como un espacio para la gestión de las necesidades del país. Pero más allá de las sutilezas de lo ideal, el tiro es, insisto, multinivel y además multigrado. Ante las dos posturas políticas en colisión, mi percepción es que en una de ellas se están haciendo pésimo las cosas, porque en lugar de trabajar con estrategias convincentes, polarizan y sus líderes se polarizan entre sí porque siguen las líneas de un guión negacionista con demasiado margen de riesgo. El puente colgante que se cayó en Morelos es una buena metáfora visual del estado de exaltación política que se vive en el Macprian.

Ese puente se va a caer

Un panista reabre un puente colgante al que le hacían falta unos tensores para entrar en funcionamiento. Se construyó en la barranca de Amanalco en una zona turística de Cuernavaca por tres y medio millones de pesos, de acuerdo con El Espectador de Morelos. Aunque todavía no estaba en condiciones de operar, era importante salir a cuadro y durante una caminata de reapertura por el llamado paseo ribereño algún publirrelacionista de los que están hundiendo a la oposición le aconsejó a José Luis Urióstegui, alcalde de Cuernavaca, encabezar con su esposa una comitiva para demostrarle a Newton con tiktokes, tuits, facebukazos y noticias en medios proclives que la ley de gravedad no existe. Se trata de una lamentable tragedia, menor a la de la línea 22 y con la que varios buitres se alimentan de manera cíclica, que opera como una imagen en movimiento de lo que es Va por México.

El día de la inauguración, pese a la información disponible y las advertencias de protección civil, la comitiva cruzó el puente y un seguidor entusiasmado dio saltitos juguetones para celebrar la hazaña de su alcalde y ¡plock! el puente se desplomó. Tal como sucedió con las cuatro alcaldías que perdieron con la alianza de marras.

Comedia de enredos

Otra escena: el líder moral de la alianza Va por México y Mexicanos Unidos Contra la Corrupción y la Impunidad, llega a un bastión de Movimiento Ciudadano y habla al tiro con los emecistas de Jalisco.

O se unen a nosotros contra ese Godzilla autocrático, o pagarán las consecuencias, dice palabras más o menos el empresario que se presume de izquierda. En Movimiento Ciudadano hay gente joven que puede combatir al PAN y al PRI que ya están muy vistos. Alfaro responde con timidez y más tarde un par de voces críticas de MC reprobaron ese discurso. Aunque en el contexto pragmático son voces útiles para “pavimentar” (me da risa esa palabra pero encaja) las vías de lo que negociarían (puestos de elección popular, nombramientos, etcétera) si hay intercambio de sortijas entre MC y VxM para 2023 y 2024. Aunque en la práctica operan en un amasiato muy visto: el Macprian.

Días después Santiago Creel calificó a Morena como algo peor al PRI, tras oportuno codazo recordó que el PRI es parte de la alianza VxM, y claro, rectificó: nosotros tenemos como aliado a un PRI ya democratizado.

Pero ¡oh sorpresa! después del descalabro electoral el brazo investigador de MCCI descubre el hilo negro: el dirigente del PRI Alejandro Moreno es “presumiblemente”, corrupto y experto en fraudes inmobiliarios. Es decir hay tiro interno. El señor Moreno exige bajar de la red esa investigación que atenta contra su dignidad so pena de establecer demandas.

Al día siguiente deciden por él y la cúpula aliancista se va en conferencia de prensa contra su enemigo histórico. Tras modificar nuevamente el guión sobre las rodillas, culpan de todas sus torpezas políticas, incluidas las divisiones internas, al Godzilla de Palacio Nacional: él nos quiere dividir, dicen a la par que desde Latinus, Madrazo le ordena a su periodista estrella dispararle varios tiros a su hermano tricolor.

En paralelo le agregan al guión un nuevo elemento: los vínculos de AMLO con el narcotráfico y trepan a ese barco a Porfirio Muñoz Ledo y a Francisco Labastida que aprovecha su resurrección para lanzarle tiros al todavía presidente del PRI perdedor.

Desde luego que AMLO tiene razón, los traspiés de esa oposición en la que también hay morenistas como Ricardo Monreal, fortalecen a Morena para 2023 y 24.

Moraleja

Una cosa es moverse en la foto y no salir, y otra es brincar con torpeza en los puentes colgantes de la política.