Opinión
La lotería del Maguey
David Gutiérrez Fuentes

La lotería del Maguey

El trabajo editorial ideal es el que fluye a través de una gestión amigable que tiene más de un propósito y más de un modelo. No siempre hay un flujo armónico, pero cuando lo detecto o a lo mejor lo idealizo, me dan ganas de contarlo. Los procesos editoriales son múltiples y este modelo de trabajo identitario me gustó porque hay mucho trabajo colectivo gestionado por Sandra Luna, la editora de Nuestra lotería del maguey, aunque Sandra advierte que, como en algunos casos, el título fue madurando en función del intercambio de saberes. En la parte trasera de cada carta, vienen los versos para cantarse escritos por Sandra, mientras les es mostrada a los jugadores como en este juego que nos identifica a los mexicanos. Vamos a aprovechar algunos de ellos, de hecho, los tiene en versión de tres o dos líneas, como intervalos de tránsito para seguir platicando de Nuestra lotería del maguey.

Foto: Especial

Foto: Especial

Del maguey bondadoso y fiel

brota la sabrosa AGUAMIEL

Mi colega chilanga que pasaba las vacaciones de niña en el pueblo natal de su mamá: La estanzuela, de Mineral del Chico, con una cultura bien arraigada al maguey y un par de abuelos cariñosos que cada verano acogían a Sandra y sus primos asimiló la experiencia y quizá fueron las raíces con sus abuelos, la tierra y la cultura viva del maguey los que se alojaron en nuestra amiga editora, quien vivió el último año pandémico con su mamá en San Diego bordadora de algunas de las bolsas para algunos juegos de Nuestra lotería del maguey. Aunque hay bolsas serigrafiadas para quien le gusta el diseño del magueycito que identifica al juego.

Pencas de maguey sazonan

esta delicia tentadora:

la hidalguense BARBACOA

Desde San Diego y La Estanzuela se trabajó la lotería en dos fases. El primer año con Sandra y su mamá allá, acompañadas de su prima y su hermano que colaboraron coloreando y armando el proyecto con gente del pueblo a distancia, y el segundo cuando Sandra decide regresar con su mamá a La Estanzuela a terminar el juego mientras a distancia sus parientes continuaban trabajando y enriqueciendo la experiencia de intercambios con gente del pueblo.

En piel de chivo llevaba

su mercancía el pulquero:

colambre, cuxantle o CUERO

Me comenta Sandra que la tradición pulquera de la región se está perdiendo, Nuestra lotería del maguey desde luego que pretende rescatarla. Es decir, el juego no sólo sirvió para mantener vivos los vínculos “a distancia” y tomar decisiones como regresar al pueblo, sino para recuperar la memoria colectiva de una de sus plantas mágicas: el maguey.

El pulque no es traicionero,

pero si abusas muy gacho,

te puede poner BORRACHO

Las palabras de Sandra Luna sobre el pueblo donde tiene raíces ayudarán más a querer este proyecto que tiene el mismo nombre del juego en Facebook: Nuestra Lotería del maguey

Es manjar por este rumbo

flor de maguey o GUALUMBO

“La estanzuela es un pueblo semirural perteneciente al municipio Mineral del Chico. Su principal actividad es el turismo porque maneja el centro ecoturístico Presa El Cedral y capta una parte de los visitantes de los pueblos mágicos El Chico y Real del Monte. Gran parte de la población se ocupa en la maquila de ropa de mezclilla y el resto en el comercio. La actividad rural ha disminuido drásticamente en los últimos veinte años, pero persisten milpas de autoconsumo y algunos invernaderos de rosa y jitomate. El maguey solía usarse como cerca y como auxiliar contra la erosión en las laderas, con las pencas se alimentaba a las vacas y mucha gente producía su propio pulque. En la actualidad quedan muy pocos tlachiqueros (unos cuatro) y el pulque es consumido principalmente por los turistas de fin de semana.

“Pero la semana pasada uno de mis tíos, padre de una de las dibujantes, nos convocó a sembrar 134 magueycitos de 8 meses; cuando alcancen los 80 cm los va a trasplantar para crear un nuevo magueyal. Los magueyes se germinaron a partir de un maguey que logró florear (la floración no siempre se logra porque para raspar el maguey hay que cortar el quiote o porque nos comemos los gualumbos, que son la flor). Los murciélagos lo polinizaron y mi prima, Nely Moreno Pérez, recogió las semillas y las colocó en un germinador, en el que se lograron casi todas.”

La membrana de la penca

saboriza hasta el bigote.

Ay, qué exquisito MIXIOTE

Un proyecto tan bonito merece nombrar a todos los que lo materializaron y quienes lo están diversificando, ahí les van: Editora: Sandra Luna Pérez. Color: Valentina Chavarría Pérez. Dibujos: Laura Pérez Rodríguez, Monserrat Pérez Rodríguez, Leonel Luna Pérez, Galdino Pérez Manríquez, Nely Moreno Pérez, Miguel Ángel Pérez Munguía, Sophia Luna Serrano, Lilia Munguía Arista, María Luisa Pérez Morales, José Luis Pérez Manríquez, Mauricio Mandujano Pérez. Bordado: Josefa Pérez Morales, Emma Rodríguez Hernández y Rufina Montiel Hernández. Formación y asesoría: Maribel Fonseca.