Opinión
Sonrisas francas y dientes hoscos
David Gutiérrez Fuentes

Sonrisas francas y dientes hoscos

Las sonrisas sinceras

Mis perros me abrieron de nuevo cancha este domingo, son muy amables y luego luego les reconozco su risa, más amables que algunos congéneres enseñadores de dientes hoscos o sonrisitas que nomás de verlas a uno no le laten. Desde su contrario, la sonrisa sincera y feliz, pondré el primer ejemplo de dientes hoscos.

Twitter Maru Campos

@MaruCamposG

Ejemplo 1. La sonrisa de la gobernadora Maru Campos

El origen de esta disertación proviene de una charla entre Álvaro Delgado y Alejandro Páez en Los periodistas. Yo ato cabos y lanzo otros de esa plática para explicar mi idea de sonrisa sincera. Uno de sus atributos es su trasparencia y el modelo explicativo tiene un buen ejemplo en la sonrisa de la gobernadora que se ve franca y agradable, además de que su discurso tiene una exposición cortés, pero sin perder el estilo norteño directo y llano, opuesto al discurso de odio de mucho enseñador de diente hosco de su partido y de otros membretes de saqueo múltiple.

Los comentarios a propósito de esta sonrisa en Los periodistas fueron justamente por ahí y expresaron una hipótesis que me pareció muy razonable con respecto al PAN y la oposición de membretes extendida, hay dos oposiciones que claramente están en pugna: la sensata y la, si no tonta (pienso en Fox y en sus tuits de odio), sí con muchas piedras biliares y con varios ejemplos de un fenómeno al que conviene ponerle la lupa porque por ese camino me cae que no van a llegar a ningún lado, salvo al repudio o la inútil adscripción, en una relación de costo beneficio, de dos zombis más polarizando y difundiendo noticias falsas enseñadoras de diente hosco como el supuesto montaje de un video de trabajo del presidente y algunos colaboradores, acompañados de Claudia Sheinbaum y Alfredo del Mazo.

La tesis de un prianrredismo que no se compra e incluso abomina las expresiones de odio de sus deplorables luminarias; un prianrredismo constructivo mejor representado en una gobernadora como la de Chihuahua, me parece plausible y compartible. El pragmatismo del odio es la peor de las estrategias en estos momentos.

Ejemplo 2. Un catálogo político de enseñadores de dientes hoscos

El modelo político del diente hosco tiene un amplísimo catálogo, aunque en el cuadro de honor figura Jesús Zambrano, parece ser que Porfirio Muñoz Ledo, competitivo hasta para caer más gordo, se ganó su foto entre los legionarios de los dientes hoscos con su discurso deplorable y triste para tender puentes de entendimiento visceral entre Movimiento Ciudadano y los morenistas que “desviaron” el rumbo. Más gagá, imposible.

Tengo la vaga impresión de que si don Porfirio jugara con mis perros se alivianaría porque hasta sus colmillos de cobre se ven lamentables. Siempre ha sido gruñón pero ahora da pena verlo como un cansado y derrotado profeta de fracasos.

Aunque mis perros por lo regular están contentos y sonrientes, de pronto enseñan el diente hosco. ¿Se imaginan una política de dientes hoscos de tiempo completo? Sería intolerable. Pues bueno, ese es el modelo del prianrredismo bolsonarista y el naranjismo vendedor de votos.

Felipe Calderón es un mostrador nato de dientes hoscos y los abonados a la liga de beneficencia de sus tuits lo son también. El punto es que el ceño fruncido alcanzó su límite de contagio y ahora va de picada. Cada vez son más ridículos los promotores del odio y sus planes de sabotaje.

Ejemplo 3. Un posible escenario de dientes hoscos

Explican Juan Carlos Monedero y otros intelectuales de izquierda que cuando el capitalismo salvaje entra en crisis hay posibles reflujos de ultraderecha que pueden volver más inestable al país apostando al fracaso de las políticas sociales o de crecimiento económico de gobiernos de izquierda; haciendo del odio y el racismo una bandera política como en el caso de Vox.

Por absurdo que parezca esto hace la oposición de dientes hoscos en el país. Frena el desarrollo económico y le pone trabas a la democracia con argumentos proteccionistas de los contratos sucios o por lo menos leoninos para la nación entre privados y gobierno que se amarraron hasta los últimos minutos del ejecutivo de las oligarquías especulativas que llegó a su fin en 2018. Presentan panoramas apocalípticos, insultan, inventan noticias y lanzan retos para ser desmentidos en las mañaneras mediante una apuesta suicida: que fracase un proyecto de nación que no está para firmarles cheques en blanco que luego todos tenemos que pagar.

El balotaje chileno entre el pinochetista José Antonio Katz y el izquierdista moderado Gabriel Boric, será un campo de experimentación para los enseñadores de dientes hoscos, si pierde el primero tendrán que replantearse su estrategia de odio, si gana, que parece difícil, tal vez tengan un momento de relajamiento porque tanto gruñido debe ser dañino.

Aquí la prueba de fuego la darán los legisladores en la votación de la reforma eléctrica. ¿En serio están dispuestos a dispararse en el pie con un fobaproa para empresas especuladoras de energía? Ya lo veremos.