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Investigadores del IBt-UNAM desarrollan el primer antiveneno recombinante contra serpientes venenosas de África · Estudio se publica en “Nature”

Antivenenos mexicanos, ahora van contra las víboras africanas más peligrosas

Antivenenos El antiveneno protege contra las especies de serpientes venenosas de África, incluidas cobras, mambas y rinkhals. (IBt-UNAM)

Investigadores del Instituto de Biotecnología (IBt) de la UNAM desarrollaron un nuevo antiveneno que protege contra las especies de serpientes venenosas de África, incluidas cobras, mambas y rinkhals, y que supera a los productos existentes derivados de suero animal. Los detalles de la investigación se publican en la revista “Nature”.

“El envenenamiento por mordedura de serpiente es una enfermedad tropical desatendida que afecta de manera desproporcionada a las poblaciones de las regiones tropicales rurales, con una carga sustancial en el África subsahariana. Se estima que en esta región se producen más de 300.000 mordeduras de serpiente al año, que provocan más de 7.000 muertes y 10.000 amputaciones, aunque la incidencia y la mortalidad reales podrían ser hasta cinco veces mayores”, refiere el artículo “Nanobody-based recombinant antivenom for cobra, mamba and rinkhals bites”, entre cuyos autores se encuentran los doctores Edgar Enrique Neri Castro, Alejandro Alagón Cano y el estudiante Alid Guadarrama Martínez integrantes del IBt.

De acuerdo a información proporcionada al Dr. Neri Castro las mordeduras de serpiente son una enfermedad tropical desatendida, principalmente en comunidades rurales pobres y aunque es reconocida por la Organización Mundial de la Salud como una de las 21 enfermedades tropicales desatendidas, mata a más personas que todas las demás combinadas.

De acuerdo con un comunicado del IBt, la diversidad del veneno complica el tratamiento, debido a que cada especie produce mezclas distintas de toxinas que atacan los nervios, la sangre o los tejidos, lo que hace extremadamente difícil crear un único tratamiento eficaz para todas. En este sentido, los antivenenos actuales, aunque salvan vidas, tienen limitaciones: varían entre lotes, pueden provocar efectos secundarios y no cubren todas las especies de serpientes.

En el estudio presentado por el Dr. Shirin Ahmadi Nick J. Burlet de la Universidad de Dinamarca y el corresponding líder de laboratorio en la Technical University of Denmark el Dr. Andreas H. Laustsen como primeros autores, los integrantes del Instituto de Biotecnología antes mencionados y la colaboración de la Dra. Melisa Benard Valle se presentan los detalles de un antiveneno recombinante basado en nanocuerpos, que son anticuerpos pequeños diseñados en laboratorio, combinando ocho tipos provenientes de alpacas y llamas que neutralizan siete familias de toxinas presentes en cobras, mambas y rinkhals.

Antivenenos Se abre el camino a terapias más seguras, eficaces y accesibles. (IBT-UNAM)

“Combinamos ocho de estos nanocuerpos en una mezcla oligoclonal definida, lo que dio como resultado un antiveneno recombinante polivalente experimental capaz de neutralizar siete familias o subfamilias de toxinas. Este antiveneno previno eficazmente la letalidad inducida por el veneno in vivo en 17 especies de serpientes elápidas africanas y redujo notablemente la dermonecrosis inducida por el veneno de todos los venenos citotóxicos probados”, explica el estudio publicado el 29 de octubre. “El antiveneno recombinante tuvo un mejor desempeño que un antiveneno derivado de plasma de uso actual y, por lo tanto, resulta muy prometedor para la protección integral a nivel continental contra las mordeduras de todas las serpientes elápidas africanas de importancia médica”.

Este enfoque superó a los antivenenos tradicionales, previniendo muerte y daño tisular en modelos animales y ofreciendo mayor seguridad y consistencia. Como los anticuerpos se producen en laboratorio, sin necesidad de animales inmunizados, la fabricación futura podrá realizarse de forma ética, escalable y con calidad uniforme, lo que también podría permitir antivenenos más económicos. Además, este antiveneno redujo la necrosis local, abordando uno de los efectos más olvidados de las mordeduras de serpiente que los antivenenos actuales suelen no prevenir.

“Además, los antivenenos existentes pueden contener tan solo un 10 % de ingrediente activo, es decir, anticuerpos que neutralizan específicamente las toxinas del veneno. Por consiguiente, se requieren dosis elevadas, lo que incrementa los costos del tratamiento”, añade el estudio. “Asimismo, los antivenenos actuales suelen ser ineficaces para mitigar el daño tisular local causado por el envenenamiento, como la dermonecrosis, lo que contribuye al elevado número de amputaciones y desbridamientos tisulares en las víctimas de mordeduras de serpiente”.

El trabajo valida una plataforma modulary racional, demostrando que una mezclapequeña reemplazar los complejos productos derivados de plasma animal, señala el comunicado universitario. Los próximos pasos incluyen optimizar la producción a gran escala y avanzar hacia la aplicación clínica para hacer accesibles estos antivenenos recombinantes en campo.

Este estudio demuestra cómo la biotecnología puede transformar el tratamiento de las mordeduras de serpiente, abriendo el camino a terapias más seguras, eficaces y accesibles para quienes más las necesitan, con la esperanza de que estos avances algún día ayuden a salvar vidas.

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