Academia

La pandemia mostró que la brecha digital también crea una brecha en salud: UNAM

Las personas sin acceso a internet tuvieron dificultades para acceder a consultas, dice Melchor Sánchez

conferencia

Los participantes en el Encuentro Internacional de Simulación Clínica analizaron los impactos de la Pandemia en otros servicios de salud.

Los participantes en el Encuentro Internacional de Simulación Clínica analizaron los impactos de la Pandemia en otros servicios de salud.

Aunque el 80 por ciento de la educación universitaria para los médicos se enfoca en enseñarles trabajo que se realiza en hospitales, la realidad es que casi el 90 por ciento del trabajo de atención a la salud se realiza en atención ambulatoria o en consultas externas.

Este dato ayuda a explicar por qué durante la pandemia y confinamiento por COVID-19 las personas que no tenían acceso a internet también tuvieron dificultades para acceder a consultas, es decir, la brecha digital se reflejó en una brecha en el acceso a servicios se salud. Resolver esta nueva disparidad es un reto de nuestro tiempo, explicó el coordinador de Innovación Educativa y Educación a Distancia, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Melchor Sánchez Mendiola.

El académico expuso estas reflexiones durante la inauguración del “Quinto Encuentro Internacional de Simulación Clínica SIMex 2021”, que se realiza desde hace cinco años y en esta ocasión a distancia, por segundo año consecutivo, indicó que tiene el objetivo de reflexionar, aprender y compartir lo relacionado con este tema en el área clínica, gerencial, asistencial, de gestión y comunicación con los pacientes y familiares.

En el mismo encuentro, el director de la Facultad de Medicina (FM) de la UNAM, Germán Fajardo Dolci, dijo que las condiciones que hemos vivido resaltan la importancia que tiene la educación a través de la simulación en el pregrado y posgrado de alta especialidad, donde se recomienda que los residentes, de acuerdo con su jerarquía y especialidad, tengan la obligación de realizar, con éxito, procedimientos en simuladores antes de hacerlo en un paciente.

La tecnología de simulación para educar adquiere cada vez mayor importancia en la docencia y en la práctica médica. Consiste en diversos recursos como muñecos semejantes a humanos con los cuales se practica desde la atención de un infarto hasta un nacimiento; pantallas para ver el interior de ciertos órganos con precisión y acercamiento; pizarrones interactivos para intercambiar conocimiento con un experto; equipos computacionales y robóticos de telemedicina para efectuar operaciones a distancia, entre otros.

Melchor Sánchez Mendiola impartió la conferencia magistral “Retos de la Educación en Salud”, y ahí afirmó que 80 por ciento de la educación médica se enfoca en lo biológico, mientras que 60 por ciento de las muertes prematuras se deben a factores “no biológicos”, de comportamiento.

“El 80 por ciento de la educación clínica ocurre en escenarios hospitalarios, y entre 80 y 90 por ciento de la medicina se ejerce en contextos ambulatorios”, puntualizó.

En tanto, el tiempo de duplicación del conocimiento médico en 1950 era de 50 años; en 1980 de siete; en 2010 de 3.5 y en 2020 se estima que será de dos, alertó el universitario.

Con esos antecedentes, subrayó que los retos que buscan resolver los educadores médicos, Sánchez Mendiola destacó las nuevas formas centradas en el paciente; cómo excluir información redundante del currículo; crear escuelas de Medicina; adaptar los cursos gratuitos en línea (MOOC) a esos centros de enseñanza; y acortar el tiempo de entrenamiento de los estudiantes.

Uno de los desafíos más grandes planteados por la pandemia, apuntó, es el agravamiento de la brecha digital, donde el estatus de los espacios digitales está cambiando de una comodidad a una necesidad.

También en el foro académico, organizado por la Facultad de Medicina de la UNAM, la vicepresidenta de la Sociedad Europea de Simulación, Esther León Castelao, afirmó que la simulación es un cuerpo de conocimientos consolidados, cada vez más conocida y utilizada en la enseñanza de la práctica médica.

Si bien sirve como metodología docente y herramienta de evaluación, aún falta valorar sus competencias en investigación, mediante modelos in vitro y que docentes tengan una formación sólida donde se conozca la evidencia.

El vicepresidente de la Federación Latinoamericana de Simulación Clínica y Seguridad del Paciente, Diego Andrés Díaz-Guío, describió a la simulación como una mediación educativa entre aula y práctica clínica. “Es una actividad que permite la construcción de aprendizajes de manera colaborativa, social, con un entorno seguro para los que aprenden, los que enseñan y para los pacientes”. SIMex 2021 convocó a reflexionar sobre las prácticas docentes para afrontar los retos como la emergencia sanitaria, que ha dejado fuera de la práctica a miles de estudiantes.