El presidente estadounidense, Joe Biden, ha decidido sacar a la extinta guerrilla colombiana de las FARC de su lista negra de organizaciones terroristas, que elabora el Departamento de Estado, y así se lo ha hecho saber al Congreso, confirmó una fuente del Capitolio.

La fuente explicó que la notificación fue recibida este mismo martes, un día antes del quinto aniversario de la firma del acuerdo de paz, que permitió la conversión de la guerrilla más grande y antigua de América Latina en un partido político.

Dicho acuerdo, firmado en agosto de 2015 en La Habana entre el entonces presidente de Colombia, Juan Manuel Santos (2010-2018) y el entonces líder máximo de la guerrilla, Rodrigo Londoño, fue repudiado por la derecha uribista, pero le valió al mandatario la concesión del premio Nobel de la Paz en 2016.

La notificación al Congreso es el paso previo para la retirada de las FARC de la lista de grupos terroristas que elabora el Departamento de Estado. En cualquier caso, el grupo de exguerrilleros rebeldes que se han negado a entregar las armas y que todavía se hacen llamar Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), seguirán dentro de la lista negra.

En manos de Blinken

Aunque la decisión —todavía no confirmada oficialmente— la ha tomado Biden, es el secretario de Estado, Antony Blinken, el que firma la exclusión de una organización de la lista terrorista, y lo puede hacer alegando dos motivos: que las razones que motivaron la designación terrorista ya no están vigentes o que sacar a ese grupo de la lista negra obedece a los intereses nacionales estadounidenses.

Las FARC fueron incluidas en esa lista estadounidense de organizaciones terroristas en 1997. Como resultado, sus integrantes tuvieron prohibida la entrada a Estados Unidos, y vieron restringido su acceso al sistema financiero internacional, entre otras acciones punitivas.