María de la Luz vive en Iztapalapa con su familia, para ser más precisos en la colonia Campestre Potrero, uno de los territorios donde nunca hay agua.

La necesidad le hizo probar todas las alternativas: primero fueron cubetas, después compró tambos industriales, pidió durante años el servicio de pipas, pero… ahora tiene un sistema de captación de agua pluvial del programa Cosecha de lluvia.

La suya es una de las 5 mil familias que pueden aprovechar al agua de lluvia y dejar de padecer  por la falta del líquido.

“Años atrás nosotros juntábamos el agua en tinas y cubetas para lavar el baño, el patio, regar las plantas y bañar a los perros. Cuando escuchamos de este programa, nos pareció adecuado y de inmediato fuimos a las pláticas comunitarias que empezaron a dar aquí en Iztapalapa, para conocer cómo funciona este sistema sustentable”, comenta la beneficiada.

La familia Cruz quien ha habitado en la zona por más de 20 años, contó que durante años el problema de abastecimiento en la alcaldía era un problema con el que muchas personas viven, y que al enterarse del programa, gracias a promotores del gobierno capitalino que llegaron a su casa, no dudaron ni un instante en colocarlo.

“Nos mojábamos, nos cansábamos porque no eran suficientes los botes del agua, ahora ya no tenemos que estar mojándonos, batallando para que se guarde el agua. Ahora con este sistema, si necesitamos del agua sólo se conecta y ya”, explicó María de la Luz.

De acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente se intentará beneficiar a 10 mil familias en alcaldías donde más problemas de abastecimiento de agua tienen, como Xochimilco, Iztapalapa y Milpa Alta.

La función de un sistema de captación de agua de lluvia es la de recolectar el agua de la lluvia  de forma natural, mediante un proceso de filtración se retienen las impurezas que pueda contener el agua, posteriormente transportarla a un espacio de almacenamiento para distribuirla en un inmueble y utilizarla para diferentes actividades en el hogar.

Cuando empieza a llover, el agua se desliza por la tubería, cae al tlaloque (recipiente de  color azul), que es un dispositivo con un separador que desvía los primeros 10 minutos el agua de la lluvia.

Desde el tlaloque el agua sigue su curso por otra tubería donde en uno de los filtros está una malla, ésta sirve para evitar que se pase basura como hojas y bichos, después de esto llega al tinaco de los dos mil 500 litros, adentro están unas pastillas de cloro, momento en el que se empieza a tratar el agua.

El líquido resultante podrá ser utilizado para lavar los trastes, ropa, regar las plantas, el carro, sólo no se podrá beber.

Para poder ser parte del programa se debe consultar la página de la Secretaría de Medio Ambiente capitalina y consultar horarios de pláticas comunitarias que se realizan en diferentes colonias para poder iniciar el proceso de colocación. Además, las familias inscritas tendrán una visita por parte del gobierno para revisar si la casa es apta para colocar el servicio.

La vecina de Iztapalapa asegura que ha corrido la voz para que más familias se beneficien con este programa: “Hasta les he dado la dirección para que vayan a las pláticas comunitarias y aunque no sé si asistan, es muy importante que vayan porque es el primer requisito”.