Escenario

Entonces Bailemos, la obra que reúne el amor y la violencia en la intimidad

Cada semana los cuartos del Hotel Carlota recibirán esta puesta en escena dirigida por Diego del Río y la cual está en la plataforma de Fondeadora

Cada semana los cuartos del Hotel Carlota recibirán esta puesta en escena dirigida por Diego del Río y la cual está en la plataforma de Fondeadora

Entonces Bailemos, la obra que reúne el amor y la violencia en la intimidad

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Los cuartos del Hotel Carlota en la Ciudad de México se convierten los fines de semana en el escenario que alberga la puesta en escena Entonces Bailemos, una obra donde el amor y el odio se conjuntan con el sexo y la violencia, para llevar al espectador a una experiencia de intimidad con este proyecto que tiene el apoyo de Fondeadora.

Diego del Río es el director mexicano encargado de llevar esta propuesta teatral en un espacio poco usual, un hotel que fue restaurado recientemente y en el que le ofrece una mayor cercanía al público con los actores que interpretan la historia. “Aquí no encontraremos una gran escenografía, esta obra es una intervención en los espacios”, aseguró en entrevista con Crónica el líder del proyecto.

Realizado en la habitación de un hotel, sólo 20 personas por función podrán ser testigos de la historia, lo que lleva a los actores a tener un reto más complicado porque, “no puedes mentirle al público, ellos sienten lo que estás contando ya que rompemos la cuarta pared del teatro, así que estamos en contacto con ellos y se involucran en todo este proceso”, destacó del Río.

“El teatro no necesita un edificio específico, solo se necesita del actor y el público, nosotros tenemos que buscar opciones porque no hay apoyo en nuestro país”, expresó el director de la obra, quien dijo que es necesario que se rompa la idea de que estos proyectos tengan que esperar una oportunidad en los grandes teatros, por lo que actualmente promueve estas iniciativas.

Además, dijo que por el escaso apoyo para las artes escénicas este proyecto a la plataforma Fondeadora porque, “no existen los recursos y necesitamos existir para que el proyecto tenga vida y se pueda dar a conocer esta historia”, agregó.

Con una temática para reflexionar sobre el amor y el sexo, la puesta en escena busca expresar “la problemática del mundo y de la sociedad que se da fuera de lo cotidiano”, dijo el impulsor del proyecto en el que se atraviesan historias en las que el sexo sin pudor, los excesos, el amor desgarrador, la sensualidad de sus actores, la violencia y el humor negro, se reúnen sobre el escenario.

Además de presentar temáticas que causarán bastante ruido para el espectador, el lenguaje con el que se desarrolla la obra, serán poco usuales para quienes se atrevan a vivir esta experiencia en el Hotel Carlota.

“Nosotros como actores, directores y escritores, tenemos que hablar de lo que nos compete de forma contundente y con sinceridad”, destacó el dramaturgo, sobre el compromiso de impulsar las obras independientes “con historias realmente originales”, concluyó.

Otro reto para los actores de esta puesta en escena, será que cada semana se cambiará de habitación en el hotel mencionado de la Ciudad de México, que será testigo de esta representación, y cada uno, entre miembros actorales y de producción, tendrán que adaptarse a cada espacio y hasta reinventar sus personajes.

Dirigida por Diego del Río, con texto original de Martín Flores Cárdenas y música de Julián Rodríguez Rona, el elenco está conformado por Mariano Palacios, Héctor Kotsifakis, José Sampedro, Vince Miranda, Milena Pezzi y Gabriela Steck, éstas últimas también productoras del proyecto, contando también en la producción ejecutiva a David Ahedo.  

Con dos funciones los sábados, 19:30 y 21:00 horas, el público podrá experimentar esta nueva propuesta en la cartelera de la Ciudad de México, que puede ser acompañada por una cena previa o posterior a la obra, en el restaurante del hotel sede, que se ubica en Río Amazonas 73, entre Río Lerma y Paseo de la Reforma, en la colonia Cuauhtémoc.