
Un mérito del escritor, dibujante y diplomático mexicano Fernando del Paso (1935-2018) es que su obra sigue importando lo suficiente a las personas para reunirse en el auditorio del Colegio Nacional, a pesar de obstáculos como la lluvia y las problemáticas de movilidad típicas del Centro Histórico de la CDMX.
“Es uno de los autores más estudiados de nuestra literatura”, comenzó el escritor y Premio Crónica, Juan Villoro. Sin embargo, “siempre hay posibilidad de abrir una ventana para observar una luz distinta sobre su obra”
Durante la mesa de homenaje “90 años de Fernando del Paso” se reunieron Carmen Villoro, Élmer Mendoza, Alejandro Espinosa Fuentes y Carlos Mariscal de Gante, moderados por el colegiado Juan Villoro.
Primero, la poeta y psicóloga Carmen Villoro recitó el texto “Celebración de vida”, en el que declaró que “toda la obra de Fernando del Paso, su escritura y pintura, dibujo y gusto por las ciencias y la Historia, son celebración por la vida y victoria sobre la muerte”.
El investigador del Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM, Carlos Mariscal de Gante abordó El Palinuro de México (1977), a la vez que entretejió distintos textos y autores junto a la obra de Fernando del Paso.
Luego, el escritor y editor Alejandro Espinosa Fuentes habló de la primera novela del escritor, José Trigo (1966), que recordó haber leído por primera vez en la prepa.
“Rulfo que casi no se emocionaba con nada, se interesó seriamente con el proyecto desde sus primeros bosquejos, quizás entendiéndolo como una continuación de su propia obra. Arreola también apadrinó la novela y fue la primera publicación de narrativa en la editorial Siglo XXI y vendió la totalidad de su tiraje de 4000 ejemplares en una semana y ganó el premio Javier Villaurrutia. Pero pasados los 10 años, como promesa de consagración de toda obra maestra, sus lectores se fueron diezmando, hasta que la primera obra de Fernando del Paso quedó relegada al cajón de los experimentos”, participó.
Asimismo, “con gran generosidad, Fernando del Paso se acercó a Juan José Arreola y le dijo, “¿Por qué no me cuentas tu vida?” Y uno de los libros más extraordinarios, yo creo que es también un modelo de periodismo cultural, es Juan José Arreola contándole su vida a Fernando del Paso”, relató el escritor Juan Villoro.
Desde su perspectiva, del Paso captó con gran destreza la voz de Arreola, que es “verdaderamente extraordinaria”.
“Entonces yo creo que la oralidad alimentó mucho a Del Paso. Está en los monólogos de Carlota, me parece que es muy evidente y está también en su gusto por estos autores que no necesariamente escribían para ser leídos, sino para ser recitados o declamados, como autores de la Grecia clásica o de la primera Roma clásica”, agregó.
Por su parte, el autor sinaloense Élmer Mendoza Élmer Mendoza quien fue invitado por su conocimiento sobre la obra de Fernando del Paso leyó su texto “Fernando del Paso: autor negro”.
“Además de muchísimas cosas, también la física me acercaba a don Fernando, fue una bonita etapa esa”, consideró antes de ahondar en la novela policiaca “Linda 67: historia de un crimen” (1996)
“Se percibe un autor sibarita, observador atento e investigador acucioso, sobre espacios, culinaria, vinos y perfiles humanos de edades e historias personales diferentes”, observó.
También cantó durante su intervención. Al finalizar, las lecturas de todos los ponentes, Juan Villoro agradeció y recitó una lista de saludos por parte de instituciones de toda la República y Latinoamérica, tras lo cual hubo tiempo para un par de preguntas del público.
La transmisión completa se puede consultar en la plataforma Youtube del Colegio Nacional Mx (https://www.youtube.com/watch?v=zdo00spo45E)