La ilustradora, autora y docente Valeria Gallo encuentra en el dibujo —y en la enseñanza— dos caminos que se retroalimentan. Imparte clases en la Facultad de Arte y Diseño de la UNAM, donde asegura que su trabajo docente y su producción artística no compiten entre sí, sino que se potencian. A estos dos mundos, dice, hay que sumar otro fundamental: ser mamá de Patricio, hoy de veinte años.

Valeria llega a esta conversación con el entusiasmo fresco de quien acaba de lanzar Raros, su nuevo libro álbum silente publicado por Travesía. El proyecto nació de bocetos espontáneos: personajes extraños, criaturas únicas que, desde el principio, llevaban una etiqueta escrita en la parte superior de sus páginas: “Raros”. Aquellas primeras pruebas, guardadas en una libreta que aún conserva, terminaron convirtiéndose en un catálogo de seres tan singulares como interesantes.
“Raros no es una historia larga; es un momento”, explica. Un instante casi cinematográfico en el que estos personajes se encuentran por primera vez, mirándose con prejuicio y desconfianza, sin advertir que ellos mismos también son raros. La autora retoma aquí una inquietud que atraviesa su obra: desmontar la carga negativa de la palabra “raro” y reivindicarla como sinónimo de autenticidad, singularidad e identidad.
Hablar desde el silencio
Aunque sus proyectos parecen abarcar temas distintos —desde la diversidad familiar de En sus zapatos hasta la novela gráfica ¿Feminismo? ¡Eso qué!—, Gallo ve una unión clara: la libertad. Libertad estética, libertad de ser y de imaginar, libertad de romper normas y expandir la mirada.

En En sus zapatos, por ejemplo, aborda los prejuicios desde la inocencia de un niño que descubre que el mundo no ve a su familia como él la ve. Un padre que usa tacones, una comunidad que juzga. Todo narrado con la sutileza de las imágenes y sin necesidad de palabras.
Porque para Gallo, dibujar sin texto es natural. El libro álbum silente le permite construir narrativas completas desde la ilustración, sin que la palabra sea un requisito. “Nació en silencio”, dice sobre Raros. Y ese silencio, paradójicamente, comunica muchísimo.

Valeria detrás del lápiz
Su proceso creativo está lleno de pequeñas obsesiones. Gallo dibuja casi todo a lápiz, pero detesta que se manche. Su solución es tan casera como efectiva: spray fijador… para cabello. “Siempre se lo recomiendo a mis estudiantes”, dice entre risas. En su estudio huele a salón de belleza porque cada boceto lleva su nube de fijador. “Cada ilustradora tiene sus mañas”, confiesa.
Cometa también que otra de sus obsesiones se encuentra en lo que traza: “Una obsesión que he tenido es personas. Me gusta mucho dibujar personas”
Un público más abierto… y más exigente
Sobre la recepción del libro álbum silente en México, Gallo es optimista. Afirma que cada vez hay más espacios —ferias, congresos, charlas— que impulsan la literatura ilustrada, la novela gráfica y el libro álbum. Y, quizá más importante, más lectores dispuestos a leer imágenes, una habilidad que considera fundamental.
Para ella, la lectura visual no solo es clave para la infancia, sino una puerta enorme para cualquier lector. Lo vivió con su hijo: desde que nació, leía imágenes con él, y hoy estudia escritura creativa y literatura. “El fomento a la lectura empieza ahí, en la lectura de imágenes”, sostiene.
El boom de ilustradores mexicanos
Gallo ve en México una escena vibrante de ilustración contemporánea: autoras y autores que ganan concursos internacionales, exponen en museos y publican en sellos importantes. Muchos de ellos, además, están formando nuevas generaciones en diplomados y talleres. Para ella, el siguiente paso natural —y necesario— es que más ilustradores cuenten sus propias historias, no solo que interpreten las de otros.

Lo que viene: proyectos, talleres y la FIL Guadalajara
Mientras continúa trabajando en un nuevo libro álbum que combinará imagen y textos muy breves —y que aún no tiene editorial definida—, Gallo se prepara para llegar a la FIL Guadalajara. Ofrecerá talleres infantiles, uno para profesionales en FILustra, y presentará Raros el martes 2 de diciembre a las 18:00 horas—donde también firmará libros y regalará stickers a quienes lo adquieran.

Valeria Gallo confirma algo que sus personajes ya dicen sin palabras: la rareza es belleza, la diferencia es potencia y la libertad —para crear, ser y mirar— sigue siendo su mayor obsesión.