Búsqueda
Cuando un compositor toma un texto, ya sea de un amigo o un autor antiguo, lo primero que le interesa es la sonoridad, “busca la música de esos versos".
"Y cada compositor va a encontrar música distinta, pero hay algo emocional dentro de los versos que creo que todos los compositores tendríamos que estar de acuerdo, si es que les ponemos música", considera el compositor y director de orquesta mexicano, Arturo Márquez.
Fue con este método de aproximación a la literatura que el reconocido autor del Danzón no. 2 y otras piezas emblemáticas de la cultura nacional contemporánea compuso "Cantata de la memoria y el amanecer", obra que adapta cinco poemas de Saúl Juárez en cinco grandes movimientos orquestales: se estrenará el próximo jueves 30 de noviembre, a las 20:00 horas, en el Centro Cultural Roberto Cantoral.
¿Qué música dicta el texto? “¿Qué está gritando o cantando?”, son las preguntas con las que Arturo Márquez ahonda en la adaptación musical de una obra literaria.
Para él, incluso al hablar se pueden escuchar tonalidades o modulaciones tonales que indican la pauta para una composición. “… Acá entre nos… ¿de qué otra manera lo podemos decir?”, tararea a modo de ejemplificar este punto.
Añade que existen dos momentos fundamentales para un compositor: cuando termina una obra y cuando tienen una gran presentación.
“Esta es una propuesta nueva que lo que había hecho anteriormente y espero que puedan venir a escuchar este nuevo trabajo. Le he dedicado muchos meses de trabajo”, invita e informa que se trata de una cantata no tan larga, con duración total de “unos 26 o 27 minutos”.
LOS POEMAS Y LA FANFARRIA.
El compositor es consciente de que cuando uno mueve los versos de un poema de su lugar, el significado también puede cambiar. En ese sentido, Arturo Márquez detalla que le pareció un privilegio poder adaptar estos 5 poemas en amistad con su autor.
“Entre Saúl y yo empezamos a platicar cómo podíamos realizar la obra. Tuve una enorme ventaja, con Saúl: al tenerlo de amigo cercano es que su texto lo pude manejar de muchas maneras, lineal o hasta cubista –de agarrar un texto y poner un verso por aquí o por acá-, se prestaba para eso”, relata.
“Cuando le platiqué esta idea, Saúl estuvo de acuerdo desde el principio y ustedes van a escuchar cinco poemas, cinco movimientos, algunas veces tal y como están en los poemas de Saúl y otras veces de una manera… como viajando con el significando de cada verso, cambiados de lugar”.
Además, sobresale que la “Cantata de la memoria y el amanecer” es una pieza en la que el autor sonorense rinde homenaje a la labor del personal de salud de México y el mundo por su trabajo durante la pandemia por Covid-19.
“Saúl así plantea este concierto y yo lo respaldo totalmente: es un agradecimiento a todos aquellos que estuvieron al pendiente de que pudiéramos salir adelante; de que estemos la inmensa mayoría aquí”, explica Arturo Márquez.
“Todos recordamos estos momentos, cada quien tiene una percepción pero todos podemos estar muy agradecidos con gente que estuvo al frente -los doctores, enfermeros, hospitales, ambulancias- y está dedicado a toda esa gente”, continúa.
En gran medida, la utilización de metales y ausencia de cuerdas en esta obra refleja la necesidad de energía que tenía el compositor de aludir al anuncio oficial de un final y comienzo.
“Escogí metales porque necesitaba una especie de fanfarria, necesitaba la fuerza de las trompetas, los cornos, los trombones y el barítono, que fue mi instrumento cuando tenía 19 años y nunca lo he tocado… tocaba el trombón, soy un músico de banda de metales; siempre he tenido una cercanía con los metales”, comparte.
Finalmente, le parece que es un canto “al despertar, al haber salido de esta pesadilla, entonces hay que hacer una gran fanfarria y se hace mucho mejor con metales y percusiones”.
“Y no tengo cuerdas porque no las necesito para esta obra. Vamos a ver después, el arrepentimiento puede llegar en cualquier momento, yo estoy siempre en la penúltima versión”, insinúa.
ESTRENO MUNDIAL.
El concierto contará con alrededor de 100 artistas en escena, integrantes del Ensamble Escénico Vocal, el Coro Sinfónico y los Ensambles de Metales y Percusiones de la Orquesta Escuela Carlos Chávez.
“El ensamble instrumental está formado por cuatro percusionistas, cuatro cornos, cuatro trompetas, tres trombones, barítono y tuba. El coro es de aproximadamente unas 60 personas”, precisa el director musical del concierto, Eduardo García Barrios.
Anteriormente, Eduardo García Barrios ha dirigido otras dos composiciones para voces de Márquez, Cantata sueños y Alas (a Malala), que considera ser un emblema de la música mexicana actual, y observa algunas características de su obra.
“Hablando de géneros, en Arturo siempre el elemento de la tradición está presente y no porque sea una posición ideológica, simplemente así piensa la música”.
“En esta obra hay algo de himno, en lo general, más allá de que el tercer movimiento es huapachoso, es un movimiento y melodía de enorme sencillez, casi melismática, casi salmódica, hay algo de ritmo y me refiero incluso al uso de la armonía y contrapunto”, comenta.
También apunta que la armonía axial, un tipo de armonía particular en las relaciones entre acordes que usa Arturo en este caso, ya la había utilizado en otras ocasiones, pero aquí resulta particularmente evidente.
Por otro lado, el director señala que Márquez utiliza modos antiguos a los que alude la palabra “memoria” en el título de la pieza.
“Hay algo de ancestral, de música antigua. Por supuesto, mezclada con la rítmica. Arturo es muy contrapuntístico, es una técnica polifónica y la verticalidad en este caso es importante. Hay algo primigenio en este tipo de construcción”, elabora.
Asimismo, Eduardo García Barrios manifiesta que Arturo Márquez estuvo mucho tiempo “sin componer una nota, oyendo los textos de Saúl Juárez y los textos le fueron diciendo qué sonoridad se requería”.
“Lo cual no quita que en efecto en dos años nos sorprende y hace una versión sinfónica de la obra, encontrando otros matices, pero de momento estamos felices porque el ensamble de metales de la Carlos Chávez la va a estrenar, los jóvenes están profundamente emocionados de poder hacerlo y mañana tenemos el primer ensayo”.
CONCIERTO
En el marco del estreno mundial de la Cantata de la memoria y el amanecer, de Arturo Márquez se interpretarán también las obras “Fractalia”, pieza para marimbas calificada como minimalista, del compositor y percusionista estadunidense Owen Clayton Condon, y “Mosaico”, pequeña suite para metaleros, del pianista Dmitri Dudin, compuesta durante los meses más álgidos de la pandemia.
“La Sociedad de Autores y Compositores está decidida a difundir, a como dé lugar, nuestra música de concierto. La música de concierto es música culta, fina, que por desgracia no tiene acceso a todos los públicos”, invita por su parte el artista musical Martín Urieta, presidente del consejo directivo la Sociedad de Autores y Compositores (SACM).
El estreno mundial de “Cantata de la memoria y el amanecer. Voces, metales y percusiones” se llevará a cabo en el Centro Cultural Roberto Cantoral (Puente Xoco s/n Puerta A, Benito Juárez, CDMX) el jueves 30 de noviembre, a las 20:00 horas. La entrada es libre, con cupo limitado.
Si no puedes asistir a esta ocasión, el sábado 2 de diciembre a las 13:30 horas habrá una repetición del concierto, también gratuita, en la Sala López Mateos del Centro Cultural Los Pinos.
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