“El canto de los insectos”, una novela sobre el destierro que causó la Segunda Guerra Mundial
Alfredo, un joven alemán, llega a Quintana Roo tras el asesinato de su amigo judío y ser buscado por la Gestapo, dice la autora Erika Notni
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Alfredo es un joven alemán que huye de su país tras el asesinato de su amigo judío durante la Segunda Guerra Mundial. Alfred llega a la Ciudad de México, pero la guerra lo alcanza y migra a un pueblo de Quintana Roo donde se maravilla con el sonido de los insectos y donde lo cobija una familia mexicana.
Ése es el argumento del libro “El canto de los insectos” (Nostra Ediciones), de Erika Notni, una novela breve que narra escenarios propios de la selva maya: cenotes, cuevas con murciélagos e infinidad de insectos como la cigarra que le transmiten una gran tranquilidad al protagonista.
“Mi bisabuelo era de Alemania, era afinador de piano y también hacía pianos pero tuvo que emigrar a México, se volvió entomólogo y me pregunté cómo era que a su oído tan fino le había llamado la atención los insectos, tenía que haber un hilo conductor entre la música del piano y su buen oído con los insectos”, comenta la autora.
Erika Notni empezó a investigar hasta caer en la cuenta de que grillos y cigarras eran cajitas de resonancia al igual que los pianos.
La novela.
“La historia de libro empieza en Alemania en donde Alfred ve cómo matan a uno de sus mejores amigos, que es un judío, entonces la Gestapo lo empieza a perseguir y se ve en la necesidad de llegar a México donde su papá tenía un gran amigo: un encargado de una tienda de pianos”, platica.
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Alfred llega sin saber español y sin tener idea del país. “Pero el país declara la guerra a Alemania y empieza a haber una persecución de alemanes como presuntos espías nazis y los llevan a Veracruz, a un campo de retención. En esa persecución Alfred se escapa, toma el primer camión que se encuentra y llega a Nuevo Durango, un pequeño pueblito en Quintana Roo”, añade.
El protagonista conoce a una familia, dueños de la pensión donde se hospeda, y escucha por primera vez el canto de los insectos y se da cuenta que es muy similar a la música del piano.
“Es una familia típica mexicana, bastante folclórica, muy ocurrente y lo arropan como se hace en los pequeños pueblos, arropan al que viene de afuera, al extranjero. La historia se va dando entre cenotes y cuevas de murciélagos hasta que la guerra alcanza a Alfred en Nuevo Durango”, comenta.
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Erika Notni platica que esta novela primero era un guion de cine, sin embargo, durante los años de confinamiento por COVID-19, sus editores le pidieron transformarlo.
“Hubo gente que pasó dos años de su vida en soledad y lo que creo es que los momentos en donde los músicos sacaban sus instrumentos y en los balcones se armaba una gran fiesta para quienes estaban solos, es un poco lo que las desgracias hacen en el ser humano: sacan la parte más bonita, la más fraternal, de amor, ayuda y comprensión con los demás”, expresa.
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