Cultura

Elizabeth Catlett y Francisco Mora y su plástica a favor de trabajadores y oprimidos

Ella decía que representaba a esos sectores porque era pobre, mujer, negra y mexicana. La muestra, conformada por 91 obras, se exhibe en el Munae

exposición

“The torture of mothers [La tortura de las madres]”, 1970, de Elizabeth Catlett.

“The torture of mothers [La tortura de las madres]”, 1970, de Elizabeth Catlett.

La lucha contra el racismo, las diferentes expresiones de maternidad, el trabajo en minas y la educación en comunidades rurales, fueron los temas que la artista Elizabeth Catlett (Washington, 1915- Morelos, 2012) y su esposo Francisco Mora (Michoacán, 1922-Morelos, 2002) plasmaron en sus obras gráficas y de las que, a partir del sábado, se mostrarán 91 en el Museo Nacional de la Estampa.

En un recorrido por la exhibición “Elizabeth Catlett y Francisco Mora. Compañeros en el arte y en la vida”, el curador Arturo Rodríguez Döring detalló que Catlett llegó al país en los años 40 del siglo pasado, renunció a la nacionalidad estadunidense para vivir en México después de que le fuera negado el ingreso a su país natal por cuestiones políticas, en específico por defender a comunidades afroamericanas.

“Llegó a México con una beca de Nueva York, pero no la dejaron estudiar en el Instituto Carnegie porque era negra, entonces estudió en la Universidad de Howard que es sólo para negros. Después dio clases en universidades, estamos hablando de los años 30, consiguió una beca para estudiar en México en La Esmeralda, que en ese entonces era una nueva escuela”, comentó.

Catlett estudió escultura con Francisco Zúñiga, se integró al Taller de Gráfica Popular y a través de Pablo O´Higgins, quien era su intérprete porque no hablaba español, conoció a Francisco Mora.

“Trabajaron juntos temas derechos de los trabajadores y de los oprimidos, Catlett decía que ella representaba todos esos sectores porque no sólo era pobre, era mujer, negra y mexicana. Las obras que crearon tienen que ver con la educación, expropiación petrolera y con el campo”, destacó Rodríguez Döring.

“Sharecropper, [Aparcera]”,  1970, de Elizabeth Catlett.

“Sharecropper, [Aparcera]”, 1970, de Elizabeth Catlett.

Una serie de grabados de Francisco Mora que se exponen versan sobre el trabajo en minas. “Él era originario de Uruapan, Michoacán, pero estuvo en Pachuca estudiando la vida de los mineros y es un tema importante que no podíamos dejar de lado en la exposición”, agregó el curador.

“Tratamos de combinar a los dos artistas porque se complementan y eso es un descubrimiento, ver elementos que los unen temáticamente y estilísticamente. Mora trabajó mucho con los sindicatos y con la Secretaría de Educación Pública, es decir, con los maestros y algunas de sus ilustraciones fueron para libros de texto, fue cercano a Alfredo Zalce, García Bustos y Pablo O’Higgins”, dijo.

La pareja de artistas, en los años 60 renunciaron al TGP, época que coincide con dos viajes que Catlett hizo: a Cuba y a Guinea. Ambas fueron experiencias que les cambió la perspectiva de las luchas sociales, añadió Rodríguez Döring.

CATLETT VANGUARDISTA

La exposición muestra varias piezas emblemáticas de la producción de Catlett, por ejemplo, “Sharecropper” (La aparcera), “Las Panteras Negras”, “Young Douglass” (Douglass de joven),”Malcolm X speaks for us” (Malcolm X habla por nosotros), “The torture of mothers” (La tortura de las madres), “Danys y Liethis”, y “Gossip” (Chisme).

“Estamos en los años 60, momento en que la Revolución de Cuba es importante, hay dictaduras en Sudamérica, entonces el trabajo de Catlett y Mora se va internacionalizando, empiezan a apoyar los movimientos en otros países y las luchas sociales que criticaban al imperialismo. En sus obras veremos representaciones de luchas por los derechos civiles y por derechos raciales en Estados Unidos”, indicó el curador.

En la exposición se muestran aquellos personajes a los que Catlett hace referencia como líderes históricos anti abolicionistas del siglo XIX. Es el caso de Frederik Douglass (1818-1895), dirigente del movimiento de los derechos civiles afroamericanos del siglo XX.

“Ella, aunque estuvo en México, siguió trabajando en temas universales como el tema de la maternidad y el problema racial en Estados Unidos. Mora se quedó con el trabajo típico del Taller de Gráfica Popular que era sobre los obreros y campesinos”, dijo Rodríguez Döring.

"High heels [Tacones altos]", 1988, de Francisco Mora.

El curador destacó que Catlett fue una artista de vanguardia porque desde sus inicios hasta su muerte experimentó con serigrafia, fotocopia, reducciones, collage, bolígrafo, telas recortadas y estampadas.

Por último, señaló que existe el proyecto de convertir el estudio de esta pareja, ubicado en Cuernavaca, en un centro cultural ya que ahí se conservan varias cajas de la obra de Mora, además de una amplia biblioteca creada por Catlett.

¿Dónde?

“Elizabeth Catlett y Francisco Mora. Compañeros en el arte y en la vida” se puede visitar en el Museo Nacional de la Estampa, ubicado en avenida Hidalgo 39, Plaza de la Santa Veracruz, Centro Histórico de la Ciudad de México.