Cultura

Javier Garciadiego: “La historia dice que no debemos regresar a elecciones controladas por el gobierno”

Garciadiego presenta su libro “Historia mínima de las elecciones en México”. A largo plazo puede haber regresiones pero este país será democrático, añadió

fil de minería

Javier Garciadiego (centro) durante la presentación de su libro en la FIL de Minería.

Javier Garciadiego (centro) durante la presentación de su libro en la FIL de Minería.

Reyna Paz Avendaño.

“La historia nos dice que no debemos volver a elecciones controladas por el gobierno, no debemos destruir los aparatos que funcionan y seguir mejorando nuestro proceso y nuestro aparato electoral, porque hay muchas cosas que mejorar”, expresó el historiador Javier Garciadiego durante la presentación de su libro “Historia mínima de las elecciones en México”, en el marco de la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería.

En la obra editada por el Instituto Nacional Electoral (INE), el también miembro de El Colegio Nacional enuncia algunas de esas mejoras: instalaciones de urnas electrónicas, incrementar el voto en el extranjero, sacar al crimen organizado de las elecciones y –algo que no le compete totalmente al INE– tener mejores candidatos y mejores debates.

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Lo que estamos viendo en el terreno político es más un despliegue de iniciativas y de comportamientos que podrían hacer que el país pasara de una germinal democracia a un régimen autoritario, dice José Woldenberg.

“Este país tiene una historia muy complicada, no hagamos el futuro muy complicado”, expresó Garciadiego.

En palabras del Premio Crónica, el INE es una buena institución que organiza bien las elecciones y muestra de ello es que todos nos hemos beneficiado al momento de votar. “Lo que no tenemos son partidos a la altura de la ciudadanía”.

A largo plazo puede haber regresiones pero este país será democrático a pesar de las regresiones, añadió.

“No condeno al Presidente de la República, ganó de manera brutal en 2018, pero sí me gustaría, para ser justo y ético, que se retire con los mismos árbitros con los que ganó y el que gane en el 2024 sea con un árbitro en el que tengamos confianza, porque si no será un presidente o una presidenta deslegitimada y lo que necesitamos son políticos legitimados”, aseveró.

Javier Garciadiego detalló que su libro reduce cien años de historia electoral del país, la del siglo XX, en cien páginas donde advierte de dos falsedades, dos frases que pronunciaron Vicente Fox y Andrés Manuel López Obrador.

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“No tengo preferencias partidistas, soy un académico interesado en la historia de México, mi único partido es la historia de México. La primera frase que está en la mira de este libro es de Vicente Fox: `70 años de dictadura´. Falso, este país no ha tenido 70 años de dictadura”, dijo.

La otra frase es del presidente Andrés Manuel López Obrador: “La historia electoral de México son cien años de fraude”.

“No son cien años de fraude, son cien años de una construcción de un sistema y de un aparato electoral muy complejo con avances y retrocesos. Es un insulto al pueblo de México porque hemos tratado de construir un aparato electoral contra viento y marea”, indicó.

COMICIOS

El historiador y miembro de la Academia Mexicana de la Lengua comentó que se acerca a las elecciones no desde una perspectiva técnica, sino desde el contexto histórico ya que su libro está dirigido a lectores interesados en la cultura general.

"Las elecciones están vinculadas a nuestra historia nacional. En 1910, la Revolución inició después de un proceso electoral fallido, en 1929 el movimiento vasconcelista fue el paradigma del movimiento opositor en contra de un régimen político con problemas, 1997 se dio la primera elección en Ciudad de México, importantísima, porque teníamos prácticamente una vida sin que hubiera elecciones, no teníamos autoridades electas por nosotros, y en 2000 llegó la alternancia", indicó.

Garciadiego compartió los procesos en que divide la historia electoral del país, siendo el primero el de las elecciones violentas, de 1920 a 1928, y citó algunas de las rebeliones preelectorales de ese entonces: 1920, la Revuelta de Agua Prieta que impidió el proceso electoral, en la que murió el presidente Carranza y dos de los candidatos a la presidencia salieron al exilio.

“En 1924 la rebelión delahuertista donde el candidato a la presidencia se fue al exilio y luego 1928, que se caracteriza porque los tres aspirantes a la presidencia murieron por bala de manera violenta: Francisco Serrano, Arnulfo Gómez y Álvaro Obregón", narró.

Esas rebeliones anteriores a las elecciones nacieron porque los inconformes no fueron designados candidatos a la presidencia, indicó.

"¿Qué nos decía la historia en ese momento? Que urgía que se creara una institución que asignara las candidaturas presidenciales de manera pacífica y ordenada, esto se llamó el PNR (Partido Nacional Revolucionario)", precisó.

Garciadiego comentó que el PNR tiene muy mala prensa, que es señalado como el abuelito del PRI, pero "en ese contexto histórico fue muy importante porque a partir de entonces ya no ha habido rebeliones pre-electorales".

El siguiente momento que ubica el historiador es el de partido único, de 1929 a 1952, en donde todo movimiento surge del grupo revolucionario porque no había una oposición real.

"En 1946 el Partido de la Revolución Mexicana (PRM), el partido de Cárdenas, se convierte en el PRI, y ese año se dio una importante reforma electoral para centralizar los procesos en Ciudad de México, en la Secretaría de Gobernación, lo cierto es que fue un avance en ese momento porque antes las elecciones se organizaban y calificaban en la provincia, había mucho cacique, a pesar de todo creo que fue un avance", dijo.

El otro periodo que identifica Javier Garciadiego es el del partido hegemónico, de 1958 hasta las elecciones de 1982, en el que el PRI obtuvo todos los triunfos de todas las contiendas electorales.

"Después las elecciones de 70, 76 y 82 ¿cómo es que ganó el PRI a pesar de las crisis políticas, económicas e ideológicas? Es impactante que después del 68, donde el aparato político mexicano perdió legitimidad, ganara el PRI", dijo.

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Sin embargo, la respuestas están clara: "porque no había alternativas, la oposición no presentaba alternativas, eran partidos que apenas se estaban consolidando".

Posteriormente sucedió el lapso del partido dominante y declinante, donde el PRI ganó con menos proporción de votos y perdió diputaciones y puestos estatales.

Finalmente, Javier Garciadiego destacó el año 1997 por el nacimiento del Instituto Federal Electoral (IFE). "El gobierno ya no organizaría las elecciones, ya no calificaría las elecciones, es a partir de ese momento que en México se dan alternancias y desde entonces ha habido triunfo para los tres partidos y todos los congresos han sido divididos pluripartidistas".