Cultura

Jean-Marc Desgent: “Formo parte de los desgraciados que están destruyendo el planeta”

El escritor, considerado la figura mayor de la poesía quebequense y francófona contemporánea, dice que la familia son “esas personas con las que desarrollé una relación cercana y que no tienen una diferencia con aquellas con las que tengo lazos sanguíneos”

Joaquín Sabina en concierto
Una relación amorosa no se sitúa en el pasado, en el presente ni el futuro, señala Jean-Marc Desgent. . Una relación amorosa no se sitúa en el pasado, en el presente ni el futuro, señala Jean-Marc Desgent. . (Gaceta UdeG)

Las ruinas son parte de nuestra vida porque es la fascinación por un pasado que no pudimos ver y que sólo imaginamos o porque es el pasado que vivimos y que nos acompaña en forma de huellas. Así es como Jean-Marc Desgent (Canadá, 1951) define uno de los temas que acompaña a su poesía.

Crónica platicó con el autor, considerado una figura mayor de la poesía quebequense y francófona contemporánea, sobre la antropología, la violencia y el amor.

Jean-Marc Desgent ha recibido el Premio del Gobernador General (2005), el Grand Prix du Festival de poésie de Trois-Rivières (1994 y 2005), el Premio Sabines-Lapointe (2006), el Grand Prix du Marché de la Poésie de París (2010), el Premio Alain-Grandbois de la Académie des Lettres du Québec (2020), y fue finalista del prestigioso Prix Antonin-Artaud (2006).

¿La poesía es memoria?

La poesía está ligada con la memoria en diferentes niveles no sólo a nivel de los recuerdos sino a nivel de lo físico. Por una parte, está el pasado, lo que está en tu mente, en tus recuerdos; pero por otro lado está la parte de las impresiones, las marcas o sensaciones que dejaron en tu cuerpo, con lo que sentiste, con lo que viviste y se quedó en ti.

¿Qué tanto influye la antropología en la elección de sus temas poéticos?

Tengo una maestría en ciencias antropológicas y eso es fundamental, de extrema importancia. Si bien es cierto que intento expresar o plasmar emociones y sentimientos en mi escritura, el hecho de haber estudiado la evolución del ser humano me permite trazar estos sentimientos de manera clara, fácil y concreta.

Estudié la parte de la mitología y eso también se ve reflejado en mi escritura porque la mitología suele tener un ritmo muy marcado y es lo que intento recrear en mis escritos.

En mi obra no juzgo, no culpabilizo a nadie de otras cosas, no digo: ustedes que destruyeron la Tierra, porque yo formo parte de las personas que la están destruyendo y eso se liga a mis estudios porque lo veo desde un punto de vista más científico, intento tener una perspectiva objetiva y me doy cuenta que formo parte de los desgraciados que están destruyendo el planeta.

¿Qué son las ruinas?

La palabra ruina es una paradoja porque refleja algo que ya no está y porque también reflejan algo que sigue aquí y que nos fascina, pero ¿por qué nos fascina? porque nos hace pensar en todo lo que fue y que no pudimos conocer.

Considero que la palabra ruina nos define porque si lo vemos con la modernidad, con el paso del tiempo, con los avances tecnológicos, realmente nosotros somos ruinas del tiempo pasado, con respecto a lo que viene y a los que llegarán.

¿Admira a los enamorados? En un poema escribe que envidia al enamorado que se desviste sin pensar…

Para hacer un enlace con mi respuesta anterior, uno admira las ruinas por lo magnífico que fueron en el pasado, porque nos imaginamos lo majestuoso que pudo haber sido.

Eso lo veo un poco con las relaciones amorosas: una relación amorosa no se sitúa en el pasado, en el presente ni el futuro, una relación amorosa ya sea que siga presente o que haya terminado, tuvo un gran impacto y dejó una huella en nosotros, es decir, dejó una ruina y eso forma parte de nuestra vida, es algo que vamos a seguir admirando aunque ya no esté en el presente.

No tengo un pensamiento lineal, no me ubico en el pasado, presente o futuro. Muchas veces tengo presente a mujeres con las que tuve relaciones amorosas, con las que viví y al final de cuentas siguen teniendo un gran papel importante para mí, a pesar de que ya no estén presentes y que lo único que me quedé de ellas sean las ruinas vivientes.

VIOLENCIA Y NIEVE

“Retrato de familia” es un poema de Jean-Marc Desgent en el que denuncia la violencia de pensamientos extremistas, pero también habla del amor hacia las personas que uno elige como familia.

Estos versos, publicados en la revista “Luvina”, revista literaria de la Universidad de Guadalajara, narran la Crisis de octubre en Canadá, en 1970 cuando integrantes del Frente de Liberación de Quebec (Front de libération du Québec, FLQ) generaron asesinatos y secuestros que derivaron en la declaración de una ley marcial.

“Al inicio de esta complicación de poemas hay una lista de diferentes nombres, todas son personas que murieron en el lapso de dos años y que fueron muy cercanas a mí. En estos poemas regreso a las ruinas porque todas estas personas al haber muerto parecen seres arruinados, son ruinas que quise mucho y que admiraré siempre”, señala.

El autor comenta que para él, la familia no sólo es su padre y madre, es aquella que decidió construir con sus amigos. “Esas personas con las que desarrollé una relación cercana y que no tienen una diferencia con aquellas con las que tengo lazos sanguíneos. En este poema trato a mis amigos como si fueran mis hermanos, hablo de ellos como si fueran parte de mi familia”, expresa.

Soy una persona que no tira, añade. “Me quedo con los recuerdos y eso es lo que me permite escribir, rememorar. También tengo un poco de ingenuidad, algo que intenté hacer fue resucitarlos mediante mi poesía, escribir es una forma de devolverles la vida”.

¿El mundo se puede definir en una pelea entre empatía y violencia?

Abordo esos temas en mi poesía porque nos habla de que todos estamos llenos de contradicciones, es muy común que amamos y detestamos a la vez. Algo importante es que no digo que siempre es bueno ser empático ni que siempre es malo ser violento, simplemente no juzgo, pongo las contradicciones en la mesa y las muestro como las vivo yo mismo.

Somos seres ambivalentes. La empatía y la violencia son características que se confrontan frecuentemente pero en realidad es una de muchas otras que todos vivimos. Algo que me parece muy bello es la tensión interior que existe en el ser humano, esa tensión hace que nuestras vidas sean interesantes y bellas.

¿Las emociones son las herencias más grandes que tenemos de nuestros padres?

Voy a responder de manera muy espontánea: absolutamente no. En mi caso, nunca tuve una relación tan cercana con mis padres porque en realidad desde que era niño me acostumbré a estar solo, toda esa soledad me permitió distinguir claramente lo que sentía y la manera en que ellos percibían la vida, también eso me permitió desarrollar mi sentido de originalidad.

¿La nieve es un símbolo de identidad?

Con esta respuesta verás cómo acepto mis propias contradicciones. Odio el invierno, detesto el frío, odio el viento y todo lo que tiene que ver con el invierno, pero es la estación que saca lo más poderoso de nosotros, es la estación que al durar tanto y ser tan detestable hace que uno tenga que sacar la fuerza interior de algún lado.

Si vieras lo que es estar en la nieve, tener caminar con el viento es horrible. Uno saca la fuerza necesaria para seguir avanzando, es una contradicción y por eso siempre lo encuentras en mis poemas.

Copyright © 2024 La Crónica de Hoy .

Lo más relevante en México