El domingo 31 diciembre es la fecha límite para que el PGA Tour cierre su acuerdo marco con los patrocinadores saudíes de LIV Golf.

El Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudí no sólo está dispuesto a inyectar 2.000 millones de dólares en el acuerdo comercial propuesto como parte del trato del 6 de junio, sino también un fondo de compensación adicional de 1.000 millones para los golfistas del tour que rechazaron las lucrativas ofertas de LIV, informó recientemente Sports Illustrated.

EL SECRETO FUE UN ERROR

El acuerdo con los árabes, anunciado el 6 de junio, precisaba que el plazo del 31 de diciembre podría ampliarse si ambas partes estaban de acuerdo, aunque el Comisionado del PGA Tour, Jay Monahan, dijo posteriormente que el 31 de diciembre era un “objetivo firme”.

El error de Monahan fue mantener en secreto cerca de dos meses de negociaciones con Yasir Al-Rumayyan, quien dirige el PIF. Esto enfureció a los jugadores y llevó a que Tiger Woods fuera agregado al Consejo Asesor de Jugadores para darles a los jugadores una voz más fuerte.

Al escuchar la indignación, Monahan luego se arrepintió de no haber incluido a los jugadores.

PARTIDA DE RAHM COMPLICÓ LAS NEGOCIACIONES

Las negociaciones se complicaron el pasado 7 de diciembre cuando Jon Rahm, leal al PGA Tour anunció que había firmado con el circuito rival. No sólo ha sido una gran pérdida para el PGA Tour, sino que significó un recordatorio de que LIV Golf tiene el dinero suficiente para captar aún a más jugadores.

El mundo del golf está fracturado y Monahan llegará a este Acuerdo Marco con una mella en su imagen pública e independientemente de lo que depare el 31 de diciembre para el futuro del golf,  Monahan ya no tiene la presencia que solía tener en el PGA Tour.

LAS CONTRADICCIONES

Si el primer paso en falso fue prohibir rotundamente a los jugadores estrella irse a la gira contraria, el segundo fue alinearse con LIV Golf sin ningún aviso a los profesionales del Tour.

Del lado de los jugadores Patrick Cantlay, se sumó a las negociaciones con Tiger Woods y Jordan Spieth para proteger los intereses de los mejores jugadores que aún siguen en el PGA Tour, en sustitución de Rory McIlroy, que dimitió el mes de noviembre.

Ya sea que las partes lleguen o no a un acuerdo antes de la fecha límite del domingo (Tiger Woods cree que es posible), la mayor sorpresa en 2024 podría ser Jay Monahan, porque algunos miembros del PGA Tour piden un nuevo liderazgo.