Escenario

Si no está roto no lo arregles, noche nostálgica con Caifanes

COBERTURA. La noche del sábado se presentaron los Caifanes ante miles de personas en un concierto repleto de nostalgia, elemento actual en la música, donde dieron un recorrido por sus más de 35 años de historia>

El cantante español Miguel Ríos actúa en concierto.
Los temas de Caifanes son parte del setlist del mexicano Los temas de Caifanes son parte del setlist del mexicano (OCESA/ César Vicuña)

Si no esta roto no lo arregles, así es como dicta la famosa fase de dominio público, frase que es mejor representada por la banda mexicana Caifanes que pese al paso de los años se mantiene en el gusto del público y como parte del soundtrack del rock en México con temas como “La negra Tomasa” o “La célula que explota”.

El fin de semana la legendaria banda capitalina se presentó ante un repleto Palacio de los Deportes, más de 17 mil almas que variaban en edades pero que traían encima el fanatismo por los músicos y en la lengua la letra de todas la canciones, hecho que se demostró durante toda la noche.

Crónica Escenario fue parte de estas almas presentes el sábado, primera de dos fechas programadas y que asistió con una pregunta en el tintero, ¿Cómo estará la energía de la banda y en específico la voz de Saul Hernández?, bueno pues en resumidas cuentas estuvieron maravillosas, sí menos joviales pero igual de extraordinarios.

Alguien en la tribuna se preguntaba y se contestaba solo, sobre sí los Caifanes serían eternos, y sí. Lo han sido, lo son y lo seguirán siendo, se decía a sí mismo una y otra vez. Este momento se respondía y resonaba en cada esquina del domo de cobre por más de dos horas que duró el concierto.

Alrededor de las 21:00 horas se apagaron las luces, luego de algunos minutos de intensos chiflidos de impaciencia y de algunos juegos de los presentes, como la proverbial ola, en una forma de aminorar la espera, salieron al escenario los músicos, que en un ambiente íntimo y melancólico comenzaron el concierto.

La primera parada de este viaje nostálgico la protagonizó “Antes de que nos olviden”, el inicio y el más político momento de la noche porque fue dedicado a los desaparecidos, desde los 43 de Ayotzinapa, pasando por los periodistas muertos y culminando con las desapariciones de mujeres y feminicidios frecuentes en México.

Saúl Hernández, Alfonso André y Diego Herrera, en esa esquina melancólica continuaron con “No importa”, “Metamorfeame” y “Quisiera ser alcohol”, canciones en su versión acústica que fueron cantadas en voz baja por todos los presentes y que estuvieron marcadas por el incesante aplauso y las palabras de bienvenida de Hernández Es un sueño estar aquí otra vez en nuestra casa o en nuestra tumba” dijo entre risas.

Magia pura que le prosiguió la explosión del rock que cargan consigo desde los años 80 y 90, que reflejó con “Sólo tú”, “Miedo”, “Nubes”, “Para que no digas que no pienso en ti”, “Te estoy mirando” y “Debajo de tu piel”, esta última una de las más cantadas de la noche, y finalmente en este primer tiempo cantaron “Sombras en tiempos perdidos” y “Detrás de los cerros”.

Primer tiempo porque pocos segundos después con la premisa feminista y la frase “Una mujer viva es un símbolo de lucha”, que articulara Saul Hernández dio paso a un intermedio donde se proyectó el video de “Canción sin miedo” de la cantautora mexicana Vivir Quintana, seguida del regreso de la banda al escenario y junto con el sonido huapanguero de “Mariquita”.

Inmediatamente después y con una dedicatoria especial a los infantes presentes que desde los 8 o 9 años, y hasta un pequeño de brazos, se encontraban mimetizados entre los fanáticos, interpretaron “Ayer me dijo un ave”, gusto heredado por sus padres y representantes de la nueva generación de seguidores de Caifanes.

Serán los dioses ocultos”, “Cuéntame tu vida”, “Viento”, “Mátenme porque me muero”, “Miércoles de cenizas”, “De noche todos los gatos son pardos”, “Aviéntame” y “Afuera”, fueron los temas que siguieron y que terminaron oficialmente el concierto y que confirmaron la eternidad que disfrutan los músicos, así como la energía que irradian y la voz que conserva Hernández, claro, con más descanso, menos intensidad, pero la misma proyección.

Como ‘ya te la sa pa que te la pla’, como dicen por ahí, Caifanes regresaron al escenario luego de unos minutos de constantes vitoreos, aplausos escandalosos, gritos a coro y ensordecedores cánticos.

Primero el nacionalismo a todo lo que da con Diego Herrera en el sax a ritmo de el himno nacional mexicano, pie para que saliera la agrupación completa e interpretar “Hasta morir” seguida por “Aquí no es así”, canción donde invitaron a un par de personajes del público a cantar con ellos, elemento que desde luego conquisto al publico.

Un encore largo pero necesario que continuó con “Te lo pido por favor” de Juan Gabriel, “No dejes que…”, “La célula que explota” y finalmente “La negra Tomasa”, tema que ya es regular en los cierres de concierto de los capitalinos y que sin duda alguna es una de las favoritas del público.

La noche del sábado se podría resumir a la canción más cantada de la velada, pero para elegir una en especial sería algo imposible, va más allá del gusto particular, es verdad que algunas de ellas tiene arreglos nuevos, pero seria cosa de preguntarle a cada uno de los asistentes, pero ‘safo’ preguntarle a las casi 20 mil almas, es cosa de percepciones.

Copyright © 2022 La Crónica de Hoy .

Lo más relevante en México