Desabasto y distribución selectiva de agua, tarifas altas por suministro y hasta corrupción, están quedando al descubierto en la capital de San Luis Potosí, en la mayor crisis hídrica registrada hasta ahora bajo el mandato del presidente municipal, Enrique Galindo Ceballos.

De acuerdo con testimonios de la ciudadanía, mientras la población sufre escasez , falta o distribución selectiva del vital líquido, las tarifas por el pago de este servicios que no reciben son considerablemente altas.

En un llamado de alerta al gobierno y a las autoridades de la capital potosina, sobre su falta de responsabilidad y ética en la operación del sistema de agua potable, la población también ha denunciado la falta de la infraestructura necesaria para resolver este problema que ya estalló en crisis para el alcalde de la capital.

De acuerdo con las evidencias y denuncias hechas por los potosinos, esta crisis hídrica se agrava con la existencia de una infraestructura colapsada, plantas de tratamiento inoperantes y deudas pendientes por el saneamiento del agua, mientras que la gestión del alcalde Galindo Ceballos se ha caracterizado por sus viajes constantes, sin que atienda las necesidades de la comunidad.

“En lugares como Progreso, Satélite, Fovissste y Barrio de san Sebastián; el abasto de agua en estos lugares se da con pipas que es el negocio particular del alcalde”, comentó Luisa Monterrubio vecina del Barrio de San Sebastián.

"Las pipas cuestan entre 500 y 1700, los piperos le reportan al alcalde y el agua está sucia, huele mal y no llegan siempre, el alcalde no cumplió la promesa y tiene el negocio particular del agua", agregó.

También, al mismo tiempo, se ha puesto en evidencia en medios locales el hallazgo de que unos 400 millones de pesos, recaudados por el organismo intermunicipal Interapas a través de los recibos bimestrales, destinados aparentemente al drenaje, alcantarillado, tratamiento y saneamiento, han desaparecido en lo que suponen actos de corrupción.

Pero, por si este desfalco a las finanzas del municipio no fuera poco, también están de por medio acusaciones sobre una falta de rendición de cuentas y transparencia en el manejo de los recursos públicos destinados al crucial tema del agua.

En ese sentido, de acuerdo con el sentir de los potosinos, quienes ya califican al gobierno local como deficiente porque va a dejar “una herencia maldita”, es necesario y urgente que haya acciones de las autoridades competentes y una rendición de cuentas clara y precisa ante la sociedad potosina respecto al tema del agua.