Luego del enfrentamiento entre inspectores municipales y un vendedor de tamales en el Centro Histórico de Guadalajara, el secretario general del Ayuntamiento, José Manuel Romo Parra, asegura que se investigarán los posibles excesos cometidos por parte del personal de Inspección y Vigilancia.
El hecho, que se volvió viral en redes sociales, muestra a un tamalero que prefirió tirar su mercancía al suelo antes de que fuera confiscada por los inspectores municipales. Al respecto, Romo Parra reconoce que, si hubo uso desmedido de la fuerza, se deberá sancionar.
“Lo que no se puede aceptar es el uso desmedido de la fuerza para invitar a la gente a retirarse”, declara. Añadió que tanto la Jefatura de Gabinete como la Dirección de Inspección y Vigilancia ya realizan las investigaciones para revisar minuciosamente lo ocurrido.
El funcionario informa que ya se localizó al comerciante afectado y que el gobierno municipal buscará reponerle su mercancía, además de ofrecerle alternativas para que pueda seguir vendiendo sus productos en espacios autorizados.
“El gobierno de Guadalajara no puede tolerar los excesos. Se va a corregir el daño y brindar opciones para que el vendedor pueda ejercer su actividad conforme a la normativa vigente”, afirma Romo Parra.
El caso ha generado indignación en redes sociales, especialmente por el trato hacia el vendedor ambulante que estuvo rodeado de al menos cinco inspectores, con quienes forcejeó, además de dos policías municipales. Las autoridades aseguran que, además de reparar el daño, se reforzarán las medidas para evitar que este tipo de situaciones se repitan.