La Isla de Man, ubicada entre Irlanda y Gran Bretaña, fue en dónde nacieron estos tres célebres ingleses: Barry y los gemelos Robin y Maurice Gibb. Andy, el hermano más pequeño y también músico, escribiría su propia página en la historia de la música.
Muy pequeños se mudaron momentáneamente a Manchester en dónde vivían en condiciones muy humildes; en 1955, Barry, a sus 9 años, conformó su primera banda de skiffle y rock and roll, llamada The Rattlesnakes, y se le unieron Robin y Maurice, de sólo 7 años, como vocalistas adicionales, ahí comenzaron a descubrir y desarrollar, desde su niñez, los secretos maravillosos de una armonía a tres voces.
La familia Gibb completa: sus padres, su hermana mayor Leslie, Barry, Robin, Maurice y Andy, migraron a Australia en 1958, por lo que dejaron atrás a su banda y amigos; se establecieron en el pueblo de Redcliffe y como la necesidad de generar dinero era apremiante, de inmediato buscaron contacto con un DJ de la radio local llamado Bill Gates, quien los presentó con un organizador de carreras de autos, Bill Goode, quien les ofreció un contrato para que cantaran en la parte trasera de una camioneta, desde las pistas, en los intermedios, y todo el dinero que la gente lanzara a la pista para ellos se lo podían quedar. Bill Gates fue quien creó el nombre de: BG’s, que los hermanos cambiarían por Bee Gees, y lo hizo para referirse a él y sus amigos, por las coincidencias en las iniciales de su nombre y apellido, las de él mismo, las de Goode el promotor de carreras y las de Barry Gibb; después la historia popular contaría que el nombre de: The Bee Gees, surgió de la abreviación de Brothers Gibb, pero este no fue el origen verdadero.
La radio primero y después la TV australiana se encargaron de dar a conocer a estos jovencitos que hacían armonías a tres voces impresionantes, por lo que constantemente conseguían contratos con clubes locales; su padre, en la búsqueda de mejores opciones de trabajo los fue cambiando de ciudad, hasta que terminaron en la ciudad de Brisbane, y ahí fue en dónde Barry comenzó a mostrar su capacidad para componer canciones; algunas de sus primeras piezas fueron vendidas a otras bandas locales, y otras fueron grabadas por ellos mismos de manera independiente, lo que llamó la atención del músico Col Joy, profeta en su tierra ya con varios hits en su país y fue él quien los apoyó para lograr su primer contrato con una disquera local: Leedon Records.
PRIMER ÉXITO, EN 1965
Su primer sencillo: “Wine And Women”, compuesta por Barry, se publicó en septiembre de 1965 y los puso en el mapa de inmediato como un artista nuevo que tenían un éxito Top 40, aunque sólo en Australia.
En noviembre publicaron su primer LP: “The Bee Gees Sing And Play 14 Barry Gibb Songs” y estaba firmado por: Barry Gibb & The Bee Gees. Este álbum nos muestra diferentes estilos, por un lado, algunas piezas skiffle y rock and roll con el típico sonido de Liverpool, otras tienen un estilo folk más acústico y una en especial resalta: “To be or not to be” por su ritmo hard blues y un piano muy interesante; sus voces fueron excelentes desde sus inicios.
De inmediato grabaron su segundo álbum: “Spicks And Specks”; pero al momento de publicarlo, a mediados de 1966, decidieron regresar a Inglaterra para buscar mejores oportunidades. En cuanto pusieron pie en su madre patria, se enteraron de que “Spicks And Specks” había alcanzado el número 1 en Australia.
Antes de partir de Australia a Inglaterra, su padre, Hugh Gibb, le envió demos al famosísimo Brian Epstein, manager de The Beatles, quien los pasó al productor Robert Stigwood, y quien de inmediato les ofreció un contrato de 5 años con Polydor Records.
El paso inmediato fue publicar en Inglaterra su sencillo “Spicks And Specks”, que había alcanzado el número 1 en Australia y el siguiente fue comenzar las grabaciones de su siguiente álbum, el primero que sería dado a conocer internacionalmente, llamado “Bee Gees 1st” y publicado a mediados del mismo año; todas las canciones fueron compuestas por Barry, pero en algunas ya también comparten créditos Robin y Maurice, y de aquí en adelante todas sus canciones quedarían con el nombre de los tres hermanos. Por otro lado, para completar musicalmente a la banda invitaron como baterista a su amigo australiano Colin Petersen y a un muy buen guitarra líder: Vince Melouney.
El primer sencillo de este LP fue: “New York Mining Disaster 1941” y como se publicó con una carátula blanca y sólo con el nombre de la canción al frente, los DJ’s de la radio pensaron que era obra de The Beatles y de inmediato alcanzó el Top 20. Pero el segundo sencillo fue un súper hitazo por sí mismo: “To Love Somebody”; esta canción desde su publicación generó muchas versiones de distintos músicos de todos los géneros. Comenzaba el despegue.
ÁLBUM HORIZONTAL
En enero de 1968 se publicó el álbum: “Horizontal”, que incluía la pieza más psicodélica: “Lemon Never Forget”, las exitosas “Massachusetts” y “World”, y la melancólica “Really And Sincerely”, en la voz de Robin, que comenzaba a convertirse en la voz principal, y que contaba la historia de un fuerte accidente de trenes del que el mismo Robin sobrevivió.
Ese mismo año en agosto publicaron su siguiente LP: “Idea”; incluía la única pieza no escrita ni cantada por un Gibb, sino por su guitarrista, también tenía dos grandes hits: “I Started a Joke” y “I’ve Gotta Get a Message to You” . El plan era iniciar un tour por los Estados Unidos, pero Robin simplemente se desvaneció por agotamiento; ingreso a un hospital y el resto de la banda comenzó las grabaciones de su siguiente álbum.
1969 nos trajo el mejor álbum de The Bee Gees: Odessa; doble en su extensión, con un sabor muy progresivo desde su inicio, con algunas piezas un tanto folk country y muy buenas baladas, como: “Melody Fair” y “First Of May”. Este año también trajo un torbellino de viajes, entrevistas, presentaciones en vivo y televisadas, conciertos, hoteles… ¡problemas internos! Se avecinaba una ruptura de los tres hermanos pues Robin decidió dejarlos e iniciar una carrera como solista.
Barry y Maurice lo reemplazaron con su hermana mayor Leslie y comenzaron a grabar su álbum: “Cucumber Castle”. Sin embargo, al publicarlo, la crítica los destrozó y todos decidieron iniciar carreras como solistas. Parecía la muerte de The Bee Gees.
El verano de 1970 trajo la reconciliación y las promesas de que nunca más habría otra ruptura entre ellos. El camino a la fama, en su segundo aire, lo obtendrían con: “How Can You Mend a Broken Heart”, un verdadero himno al amor y su primer Grammy.
Otra vez su popularidad caería momentáneamente, y cambiarían de estilo a un sonido más R&B; pero en el horizonte ya se veía acercándose una silueta blanca que giraba y bailaba mágicamente con música disco: Tony Manero y el soundtrack de “Saturday Night Fever”, uno de los álbumes más vendidos de la historia y la mitad es de The Bee Gees.
lg
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