El asesinato de un hombre a balazos ocurrido la madrugada del pasado martes 26 de diciembre, en la glorieta de Los Pinos, en la Colonia Lagos de Oriente, en Guadalajara, es investigado por la Unidad de Homicidios Intencionales, de la Fiscalía del Estado.
Los agentes de esa sección siguen varias líneas de investigación, entre ellas que el móvil del crimen fue una venganza por robo, pues el fallecido y su hijo, quien resultó herido en los hechos, pero lo reportan fuera de peligro, tenían señalamientos en su contra por latrocinios en la zona.
El fallecido está identificado como Fernando E., alias “El Kimon” o “El Cule”, de 48 años de edad, quien según la Fiscalía recibió un impacto de bala en el tórax.
El reporte del asesinato se recibió a la 1:28 horas del martes, por parte de la Unidad de Homicidios Intencionales, cuyo personal acudió a la Avenida Presa Osorio, entre las calles Presa Falcón y calle Presa Oviachi, en donde encontraron el cadáver de un hombre bocabajo, cerca de una de las bancas de la glorieta que ahí se ubica.
Cerca de él estaba otro hombre que resultó ser hijo del fallecido y que presentaba heridas de bala en hombro y pierna, por lo que fue llevado a recibir atención médica, aunque se dice que ya está fuera de peligro.
Inicialmente se señaló que todo se debió a una riña entre padre e hijo y otros individuos, que derivó en la agresión a tiros. Posteriormente surgió la versión de que las víctimas se dedicaban a cometer robos a cocheras y casas de colonias cercanas y que en venganza de uno de estos hurtos fueron baleados.
EN SITUACIÓN DE CALLE
Vecinos del lugar de los hechos contaron que el fallecido Fernando E., alias “El Kimon” o “El Cule”, hace varios años pertenecía a una familia con cierta holgura económica, avecindada en la Unidad Libertador Miguel Hidalgo, pero desde hace un lustro o poco más tuvieron que vender la casa, por lo que él decidió vivir en las calles de colonias aledañas y era frecuente verlo deambular por la vía pública "en actitud sospechosa", o sea husmeando en cocheras y domicilios particulares.
Aseguraron además, que el ahora occiso pernoctaba en automóviles abandonados y que recientemente se quedaba a dormir en la cabina de uno de los camiones cargados de ladrillo, que se ofrece en venta en el sitio donde se suscitó el homicidio.