Con la intención de garantizar un transporte público más seguro, ordenado y eficiente para las personas que se desplazan diariamente entre Puerto Vallarta y Bahía de Banderas, autoridades de Jalisco y Nayarit pusieron en marcha una mesa de trabajo conjunta.
La iniciativa fue formalizada durante una primera reunión celebrada en la zona turística de Puerto Vallarta, donde representantes de ambos estados acordaron establecer reuniones periódicas para diseñar soluciones que atiendan los desafíos de movilidad en esta región costera, caracterizada por su alta actividad turística y su crecimiento urbano sostenido.
El encuentro estuvo encabezado por Sistel Karime Buhaya Lora, secretaria de Movilidad de Nayarit, y Diego Monraz Villaseñor, secretario de Transporte de Jalisco. Ambos funcionarios subrayaron la necesidad de coordinar esfuerzos para atender la creciente demanda de transporte público en este corredor interestatal, donde miles de personas cruzan diariamente los límites entre entidades por motivos laborales, escolares o comerciales.
Durante la sesión, también participaron Mariana Bulos Rodríguez, directora general de Transporte de Jalisco, y personal técnico de Nayarit. En conjunto, analizaron problemáticas comunes como la falta de regulación unificada, la seguridad vial, la calidad del servicio y la disponibilidad de unidades adecuadas para una zona con alta densidad poblacional y turística.
La mesa de trabajo tiene como propósito principal dar seguimiento a las instrucciones emitidas por los gobernadores de ambas entidades, quienes han señalado la movilidad como un aspecto clave para el desarrollo económico y social de la región.
Uno de los retos más importantes será establecer mecanismos que permitan homologar criterios entre los dos estados en materia de regulación de rutas, tarifas y concesiones, así como avanzar hacia un sistema de transporte metropolitano más funcional y digno.
La colaboración entre Jalisco y Nayarit responde también a las demandas de la ciudadanía, que desde hace tiempo ha manifestado inconformidades por los tiempos de espera, la falta de conectividad directa, las condiciones de algunas unidades y los conflictos derivados de la falta de coordinación entre los sistemas de transporte locales.
Este primer acercamiento marca el inicio de un proceso que, si bien complejo, representa una oportunidad para construir un modelo de movilidad integral en la región costera del Pacífico mexicano. Las próximas reuniones de la mesa de trabajo se centrarán en el diseño de estrategias operativas conjuntas y en la integración de otros actores relevantes, como concesionarios, operadores y usuarios del sistema.
Con esta colaboración, ambos gobiernos buscan sentar las bases para un transporte público más accesible, seguro y digno que responda a las necesidades reales de quienes se trasladan diariamente entre Puerto Vallarta y Bahía de Banderas, consolidando así una visión metropolitana que trascienda los límites administrativos.