
La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) implementará un protocolo de atención inmediata especializado para usuarios del Sistema de Transporte Colectivo Metro que sufren picaduras con agujas en los que se le administran narcóticos, con revisiones a torniquetes, binomios caninos que detectan sustancias ilícitas y personal capacitado con medidas internacionales para acompañar a la víctima y someterla a los estudios médicos en los que se descarten riesgos a su salud.
El titular de la SSC, Pablo Vázquez Camacho, detalló que habrá vigilancia permanente en todos los andenes y torniquetes, no solo de la Policía, sino también de funcionarios que brindarán auxilio de Protección Civil y los servicios institucionales del Metro.
Se reforzará la seguridad en las estaciones con 200 elementos del grupo Zorros y el grupo Panteras de la Policía Auxiliar, para hacer recorridos en las estaciones y también al interior de los vagones. Estos grupos serán móviles y es personal capacitado con conocimientos de operaciones especiales y tácticas.
Asimismo, habrá vigilancia con policías encubiertos y pasajeros simulados en las distintas estaciones y al interior de los vagones. Serán grupos móviles que viajarán junto con los pasajeros para detectar situaciones de forma preventiva o dar atención inmediata. Si es necesaria la intervención, los elementos se identificarán al momento de actuar.
Se contará con controles de acceso y revisiones aleatorias en los torniquetes, además de la vigilancia en todos los torniquetes.
Asimismo, habrá operativos con binomios caninos que tendrán la capacidad de detectar sustancias, en caso de que fuera necesario estos animales serán móviles entre las estaciones.
Para que la gente ubique con facilidad al personal policial, se contará con boceo en las estaciones, uso de megáfonos y de silbatos del personal policial de manera permanente y recurrente.
El jefe de la policía informó que el protocolo se activa de manera inmediata ante cualquier caso reportado y contempla que cuando un usuario reporta haber sentido un pinchazo, la Policía de Proximidad hace contacto con las áreas de seguridad institucional de los distintos transportes para que la persona sea remitida a un área donde recibe atención médica de primer contacto.
Seguidamente, se realiza el traslado inmediato de la persona afectada a un centro de salud designado.
A nivel clínico, se hace la identificación del caso, la intervención de los servicios médicos en los centros de salud, la clasificación en triaje habitual en un caso de una referencia por traslado, la evaluación médica, la profilaxis y la observación después de egreso.
En el centro de salud se hace una evaluación médica y se toman muestras para los distintos análisis toxicológicos, el personal de la Fiscalía recaba la denuncia e inicia la investigación correspondiente sobre el caso. El personal médico lleva a cabo una evaluación clínica completa de la víctima.
Como parte fundamental del protocolo, se toman muestras clínicas de sangre y orina con el fin de detectar la posible presencia de sustancias extrañas en el organismo. Estas pruebas se analizan con dos instituciones distintas certificadas, asimismo, se documenta por personal médico especializado y se fija con fotografía especial cualquier lesión o marca física que presente la persona.
Como parte del tratamiento posterior a la posible exposición, se inicia con un tratamiento profiláctico.
Por último, una vez atendida médicamente, se ofrece a la víctima acompañamiento legal y psicológico.
El Metro cuenta con un despliegue de poco cinco mil 800 policías que van a garantizar que en todos los andenes del Metro y en todos los puntos de acceso al metro haya presencia policial.
Además de ese estado de fuerza se cuenta con la presencia de 683 personas vigilantes del Metro, esto es personal del sistema colectivo de transporte Metro. Para esta labor se ha designado personal especial de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil que ayudarán con el monitoreo de las estaciones, además desde luego de los jefes de estación.
De enero a abril, se ha dado atención cuatro mil 479 personas por distintos padecimientos, desde mareos, náuseas, desvanecimientos y desmayos.
Un vinculado a proceso por pinchazo
En tanto, la titular de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX), Bertha Alcalde Luján, mencionó que se han recibido 41 denuncias por posibles pinchazos, de estos reportes, ocurrieron 33 en el Metro, cuatro en el Metrobús, tres en vía pública y una en Pumabús de Ciudad Universitaria.
Describió que en sólo en cuatro casos se ha detectado la presencia de algún estupefaciente en el organismo de la persona y en 15 se ha confirmado médicamente la existencia de una lesión compatible con una marca o herida en la piel, con sintomatología de mareos, náuseas o somnolencia.
Alcalde subrayó que los pinchazos no representan daños a la salud de las víctimas, ni existen indicios de que esos indicios correspondan a un patrón delictivo como intentos de secuestro, abuso sexual u otro delito de alto impacto.
De estos hechos, se han detenido a tres personas, una en la estación Candelaria, caso en el que no se pudo confirmar la acusación de la víctima, dado que las videocámaras no captaron el momento del presunto pinchazo y los resultados toxicológicos resultaron negativos, lo que dejó libre al señalado.
Durante otra de las denuncias, las autoridades identificaron una jeringa en las pertenencias del acusado, lo que lo llevó a ser vinculado a proceso bajo la medida cautelar de prisión preventiva por el delito de robo agravado.
En el tercer hecho, se inspeccionó la mochila del presunto agresor y se observó que unos palillos puntiagudos de madera atravesaban la tela del morral, sin que se confirme si el piquete ocurrió de manera dolosa.