Metrópoli

Durante los últimos seis años, del 2018 al 2024, los viajes en bicicleta aumentaron en un 71 por ciento; actualmente hay medio millón de ciclistas diarios en la Ciudad de México

“Circular en bici es un riesgo todos los días”, la realidad de los ciclistas en la CDMX

Un ciclista perdió la vida luego de ser atropellado por un camión de transporte público en la alcaldía Iztacalco. Enero 2025. FOTO: ROGELIO MORALES /CUARTOSCURO.COM (Rogelio Morales Ponce)

En los últimos años, el uso de la bicicleta en la Ciudad de México se ha consolidado como una de las mejores opciones de transporte, ya que es sustentable, asequible y eficiente. Lamentablemente la realidad para los ciclistas en la capital está llena obstáculos, lo que los hace sentir vulnerables y en el abandono por la falta de celeridad a una legislación que realmente los proteja.

En medio del tránsito intenso, la contaminación ambiental y los problemas de salud pública relacionados con el sedentarismo, la bicicleta se presenta como una solución ideal, que beneficia tanto a los ciudadanos, como al entorno urbano.

Además promueve estilos de vida más activos y saludables, para la mayoría de los usuarios la bicicleta representa un ahorro económico y de tiempo, ya que evita congestionamientos en una ciudad donde los trayectos en automóvil o transporte público pueden tomar horas.

Durante los últimos seis años, del 2018 al 2024, los viajes en bicicleta aumentaron en un 71 por ciento; actualmente hay medio millón de ciclistas diarios en la Ciudad de México.

En el marco del Día Internacional de la Bicicleta, que se celebra el 3 de junio, Crónica entrevistó a algunos ciclistas para conocer las necesidades que tienen como usuarios; coincidieron en que diariamente enfrentan múltiples obstáculos y detallaron algunas de las soluciones pendientes que tiene el Gobierno actual.

Muchas vialidades carecen de ciclovías seguras y continuas, lo que obliga a los ciclistas a compartir espacio con vehículos motorizados, poniendo en riesgo su integridad física; en ocasiones, también se ven orillados a conducir sobre la banqueta, e incluso en sentido contrario, “por seguridad”.

A ello se suma la falta de cultura vial, donde algunos automovilistas no respetan a los ciclistas, la escasa señalización y el mantenimiento de los espacios exclusivos; la mayoría de las calles están llenas de baches, pese a los programas que ha implementado el Gobierno local para erradicarlos.

“A veces es más seguro manejar en sentido contrario, viendo hacia enfrente, que estar volteando para atrás por temor a que nos vayan a aventar un carro”, comentó uno de los entrevistados.

La falta de estacionamientos para bicicletas, la iluminación en los trayectos nocturnos, y una planificación urbana que pone por encima al automóvil, también son barreras importantes para quienes optan por esta forma de movilidad.

Ciclistas urgen infraestructura y educación vial

“Sales con la idea de que en cualquier momento te puede pasar algo por alguna imprudencia de cualquier automovilista o chofer del transporte público; no existe cultura vial. En su mayoría, las vialidades de la ciudad están pensadas para los automovilistas”, comentó Sofía.

“Circular es un riesgo todos los días, eres sumamente vulnerable frente a cualquier automovilista. Y pareciera que hay una tendencia de odiar a los ciclistas; los automovilistas se enfadan por cualquier motivo, te avientan en el carro, no te permiten utilizar un carril completo cuando tienes el derecho de utilizarlo”, comentó Eduardo Cedillo.

También destacó que las vialidades con baches y poca señalización son otro problema, ejemplificó que en la alcaldía Cuauhtémoc “es muy complicado andar por algunas calles, hay mucho riesgo, a veces vas circulando y tienes inseguridad del propio terreno de la calle, entonces eso, si lo juntas con los carros que pasan a más de 30 kilómetros por hora en vías secundarias, pues hace que sea más complicado circular en la Ciudad de México”.

La diputada local Patricia Urriza de Movimiento Ciudadano, es una de las legisladoras que ha destacado la necesidad de la armonización de la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial con las leyes de la Ciudad de México, “porque consideramos que actualmente no se les da el lugar en las calles a los peatones y a los vehículos, no motorizados”, aseguró en entrevista con este diario.

Paty lamentó que el sistema de bici pública, Ecobici, este concentrado sólo en las alcaldías céntricas de la Ciudad de México, cuando debería de extenderse a las periferias, “porque las personas de todas las alcaldías utilizan la bicicleta para movilizarse”.

“Soy usuaria diaria de la bici pública en la Ciudad de México, entiendo la problemática que existe, la falta de infraestructura. Y por infraestructura, no nos referimos a falta de pintura, necesitamos carriles acotados en todas las alcaldías de la Ciudad de México”.

Explicó que en la Ley General de Seguridad Vial se establece una pirámide de movilidad que no se respeta: en la punta están los peatones, en segundo lugar las personas que se mueven en vehículos no motorizados, como los ciclistas; luego viene el transporte público y hasta el final, la última prioridad son los automóviles.

Pirámide de Movilidad Urbana.

¿Qué necesitan los ciclistas para sentirse más seguros?

Este diario preguntó a los ciclistas qué pedirían al Gobierno capitalino para sentirse más seguros y coincidieron en es necesaria la educación vial, tanto en automovilistas como ciclistas; inversión en infraestructura segura; mayor aplicación del reglamento vial para los vehículos automotores.

Así como realizar exámenes de conducción continuamente a automovilistas, y urgieron que se haga la homologación de la Ley de Movilidad y Seguridad Vial con la local.

Paty Urriza destacó que la homologación de estas leyes lleva un retraso de casi 1100 días; e informó que la Comisión de Movilidad del Congreso local acaba de atrasar dos años más la armonización de esta ley.

Políticas públicas actuales contradicen la ley

La diputada añadió que las políticas públicas de la ciudad de México, que ha implementado este Gobierno, contradicen varias de las reglas que vienen en la Ley General, como lo son las licencias permanentes.

“Sinceramente, me siento más inseguro con un vehículo a mi lado que circulando en la calle con 80 baches. Me crea mucha más inseguridad porque a veces las formas de manejar no son las adecuadas, hay sanciones, pero no las aplican”, comentó Eduardo Cedillo.

“Todos somos humanos que buscan llegar con bien a casa. Todos merecemos seguridad para poder elegir libremente el medio de transporte que queramos utilizar”, agregó Sofía.

Para que la bicicleta sea realmente una opción viable para más personas, es necesario que se fomente una cultura vial de respeto e inclusión y que con miras hacia el futuro se considere que la movilidad sustentable puede ser parte central del desarrollo de la Ciudad de México, y la bicicleta, sin duda, puede jugar un papel clave para construir una ciudad más equitativa y saludable.

Tendencias