
De enero del 2024 a junio del 2025, se han dado respuesta a 10 mil 43 llamadas de auxilio de incidentes provocados por la inclemencia del clima, como caídas de árboles, ramas, desplome de cables, inundaciones, encharcamientos y afectaciones de inmuebles, así lo explicó a Crónica Salvador Guerrero Chiprés, director del Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano de la Ciudad de México (C5).
Aún con la tempestad que provoca la gran cantidad de litros de agua y fuertes vientos que azotan a la Ciudad de México en pocas horas durante la temporada de lluvias, el C5, a diferencia de otros estados de la República, responde de manera inmediata a la línea H2O *426, llamada “C5 del Agua” o al 911.
En los últimos 18 meses, mencionó el director, se atendieron dos mil 22 caídas de árboles; mil 50 ramas que se desprendieron de los árboles; además de dos mil 110 cables que salieron de los postes; se aseguraron mil 510 árboles ladeados; personal especializado acudió a más de mil 350 predios que resultaron afectados; se intervinieron 550 encharcamientos y 449 inundaciones.
De estos reportes, la alcaldía Iztapalapa reúne el 16 por ciento, seguido de Gustavo A. Madero con 13 por ciento, después, Cuauhtémoc acumula nueve por ciento, Benito Juárez ocho por ciento, igual que Coyoacán; las denuncias más frecuentes son la caída de árboles, desplome de ramas, cables y daños a inmuebles. En menor porcentaje encharcamientos e inundaciones.
Para que los estragos de las lluvias sean resueltos pocos minutos después de que se presentan las primeras afectaciones, el C5 integra una red de asistencia junto a la Secretaría de Gestión Integral del Agua (SEGIAGUA), Protección Civil, Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), así como los Bomberos de la Ciudad de México.
El Centro de Comando y Monitoreo participa como agente de canalización, con la finalidad de que los más de 30 millones de litros de líquido que cayeron en las últimas semanas en la Ciudad, no entorpezcan la movilidad ni pongan en riesgo la vida de los habitantes y transeúntes.
“Están las líneas, los botones de pánico y auxilio. Después de que se inicia el proceso, nos tardamos menos de cinco segundos en responder, a partir de que se recibe en la sala correspondiente, donde están agrupados hasta 209 compañeros. También se puede recibir vía redes sociales, o por radio, se pasa a la sala de despacho y se decide de manera inmediata si se envían ambulancias, bomberos o patrullas”, detalló Guerrero Chiprés.
“Después le dan seguimiento a cada una de las instituciones, con el C5 del Agua, que no sólo atiende los encharcamientos, nos permite decidir si en las inundaciones es conveniente utilizar los nuevos equipos que tiene el secretario de SEGIAGUA, Omar Esparza. En el caso de Protección Civil se decide si se atiende a través de una brigada, se hace la valoración del riesgo que corresponda y de acuerdo a ello se atienden las situaciones que surjan en el camino”.
El director del C5 reconoció que si bien, la colaboración de cada secretaría logrando avances en el cuidado de la gente, las recomendaciones no son atendidas por toda la población, por ejemplo, no arrojar bolsas de plástico con heces de animales a las coladeras, evitar el desecho de cartón o plástico en las calles, dado que su acumulación en el drenaje provoca su compresión, lo que genera tapones.
El Plan de Coordinación Interinstitucional para la Atención de Emergencias por Lluvias, conocido como Plan Tlaloque, ha servido para contener los efectos de las intensas precipitaciones que se han registrado en la capital.
El Plan Tlaloque ha permitido actuar de forma efectiva gracias al trabajo conjunto entre dependencias, alcaldías y el Centro de Mando Interinstitucional coordinado por la Secretaría de Gestión Integral del Agua.
La lluvia del pasado 17 de junio generó un volumen total de 32 millones de metros cúbicos de agua, lo que equivale a llenar 16 veces el Estadio Azteca, y representa más del triple del volumen registrado el día dos de ese mes.
El plan cuenta con 115 técnicos operativos de SEGIAGUA, además del personal movilizado por la SSC y de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRPC), así como 55 equipos móviles.
Guerrero Chiprés recordó que a partir de la instalación del C5 del Agua, el 12 de diciembre del 2024, un instrumento que calificó como innovador para que la SEGIAGUA envíe las brigadas correspondientes en menos de 24 horas y en inundaciones y encharcamientos, el servicio se fortalece.
“La línea 911, así como los botones de auxilio y pánico que hay en toda la Ciudad de México, en las más de dos mil colonias y barrios; hay una enorme cantidad de situaciones que pueden requerir la intervención interinstitucional. En todos los casos hay un ecosistema de ayuda y asistencia donde participan varias secretarías”.
“Debemos de atender las alertas que emite la Secretaría del Agua y que nosotros compartimos en los espacios digitales que tiene el C5. Es un canal importante, porque junto con el de la policía reunimos alrededor de tres millones 400 mil seguidores, que es útil para reconocer que es una audiencia importante de ciudadanos atentos a lo que está haciendo el Gobierno”, destacó el director del C5.