
Comerciantes de mercados públicos desplegaron bloqueos simultáneos en las 16 alcaldías de la capital para protestar contra los llamados “abastos populares”, organizados por diputados y concejales locales.
Aunque el Movimiento Plural de Comerciantes de Mercados Públicos tenía contemplados hasta 280 bloqueos, finalmente optaron por realizar uno por alcaldía, lo que dejó afectaciones viales en puntos como Avenida Cuauhtémoc y el cruce entre Carlos Lazo y Arquitecto Luis Ruiz.
La movilización tuvo como punto de partida la inconformidad de locatarios con las jornadas de venta de productos básicos a bajo costo organizadas por actores políticos, quienes —según los comerciantes— utilizan recursos públicos sin cumplir normativas sanitarias, fiscales ni de operación.
La venta en vía pública sin regulación, argumentan, además de representar una competencia desleal, también pone en riesgo la subsistencia de más de 280 mercados tradicionales.
Uno de los puntos más afectados fue el cruce de avenida Cuauhtémoc y Xola, en la alcaldía Benito Juárez, donde se mantuvo un bloqueo más allá del mediodía. Ahí, los locatarios esperaban una postura del alcalde Luis Mendoza respecto a la continuidad de estos abastos en su demarcación.
Aunque la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) reportó cerca de 200 personas afectando la vialidad en esa intersección y otras 60 en la zona de Tacubaya, también informó que el resto de los puntos donde se desplegaron manifestantes ya registraban tránsito normal antes del mediodía.
Durante las protestas, los comerciantes informaron que al menos seis alcaldías —Gustavo A. Madero, Cuajimalpa, Venustiano Carranza, Iztacalco, Xochimilco y Tláhuac— expresaron su rechazo a estas jornadas itinerantes de venta, lo cual motivó la liberación anticipada de algunas vialidades.
En Gustavo A. Madero, los representantes del Movimiento confirmaron que la alcaldía se comprometió a no permitir abastos impulsados por actores políticos.
En Cuajimalpa, hubo diálogo previo a los bloqueos, y aunque se mantuvo una protesta simbólica, se evitó un cierre prolongado. En Venustiano Carranza, tras 20 minutos de manifestación, las autoridades locales garantizaron la suspensión de estas jornadas.
Además de denunciar la afectación económica provocada por estas ventas, los comerciantes exigieron una postura pública de los partidos representados en el Congreso local —especialmente de la coalición mayoritaria conformada por Morena, PT y PVEM— para frenar esta práctica, a la que señalan como una estrategia de promoción electoral disfrazada de ayuda social.
El movimiento también pidió una disculpa pública del diputado Juan Rubio Gualito, a quien acusan de haber desacreditado públicamente su protesta. Mientras eso no ocurra, aseguran que mantendrán la movilización y no descartan nuevas acciones en los próximos días.
Las exigencias
Entre las propuestas que los comerciantes entregaron a las autoridades destacan medidas como bajar los precios del combustible y casetas, evitar extorsiones por parte de funcionarios y cuerpos policiacos, y simplificar los trámites para operar dentro de la legalidad.
La Secretaría de Movilidad y el Metrobús informaron sobre afectaciones temporales en líneas como la 1, 2 y 4. Las estaciones entre Durango y Chilpancingo permanecieron sin servicio por varias horas, lo mismo que tramos entre Iztacalco y Viaducto.
En tanto, la Subsecretaría de Concertación Política se mantuvo desplegada en campo para establecer diálogo con los inconformes y evitar mayores conflictos.
El trasfondo de este conflicto, explican los comerciantes, tiene más de un año gestándose. Desde 2023 se ha documentado el crecimiento de estos puntos móviles de venta, muchos de ellos instalados incluso frente a los mercados tradicionales. Con el aumento de estas prácticas tras las elecciones de 2024, aseguran que las ventas han disminuido hasta en 50% en algunas zonas.