
Los habitantes de la colonia Nueva Santa María en la alcaldía Azcapotzalco tuvieron reuniones con dependencias del Gobierno de la Ciudad de México, con la finalidad de definir la obra cultural y deportiva que se construirá en el predio donde se pretendía edificar un albergue para personas en tránsito.
Tras meses de plantón y negación vecinal al exterior del inmueble ubicado en el cruce del Eje 2 Eulalia Guzmán y Plan de San Luis, las autoridades cancelaron el proyecto de la casa que alejaría a migrantes, sin embargo, hasta después de cuatro meses iniciaron las pláticas para establecer la ruta de la nueva utilidad del terreno, el cual, según habitantes, desean que sea un espacio cultural y deportivo.
El predio pasó a manos de la Secretaría de Obras y Servicios, no obstante, será hasta que el Gobierno capitalino defina el trazo del Sistema Público de Cuidados para que la obra sea una realidad, ya que se necesita conocer las necesidades culturales, actividades de recreación y deportivas que requieren los colonos.
Las primeras visiones del Gobierno central plantean la edificación de un proyecto híbrido, que en conjunto con la Secretaría de Cultura, se realice una de las 100 Utopías que la jefa de Gobierno, Clara Brugada, prometió hacer realidad en la capital; o en otro caso, que el espacio sea destinado para un Centro de Rehabilitación e Inclusión Infantil.

Sin embargo, la acción para la obra no será inmediata, si no hasta que el Sistema Público de Cuidados sea elaborado, se convocará de nuevo a los vecinos de la Nueva Santa María para que reiteren sus necesidades acerca de qué tipo de proyecto desean.
Las autoridades les aseguraron a los vecinos que sin importar que el inmueble tenga un uso de suelo habitacional, el terreno no será destinado a vivienda.
“Estamos esperando la tercera mesa de trabajo, donde la documentación de la medición del predio con los ingenieros de obras para hacer los planos”, dijo una de las COPACOS.
“La Secretaría de Cultura y la alcaldía presentaron la manera de hacer una Utopía en ese espacio, midiendo el taller para que sea un centro de cultura para todas las edades. Mencionaron que los talleres son perfectos para hacerlos en esa área, en sitios abiertos”, mencionó Sandra Amescua, COPACO de la colonia.
En uno de los oficios emitidos por el Gobierno capitalino, se estableció que la alcaldía Azcapotzalco será quien administre el predio y colaborará con las autoridades locales para determinar su utilidad.
Durante una reunión vecinal donde se comunicaron los avances, los vecinos afirmaron que las Secretarías de Cultura, Obras y Planeación y Ordenamiento Territorial, así como la alcaldía Azcapotzalco tienen la disposición de atender las peticiones del proyecto cultural; con todo, ven inoperante que el plantón siga.
En la asamblea también participaron representantes del área de Participación Ciudadana de la alcaldía, quienes detallaron que al momento la administración no cuenta con una asignación real para el futuro del predio, será hasta que la edil, Nancy Núñez convoque a las mesas de diálogo con vecinos y Gobierno central para definir el proyecto cultural.
Asimismo, arribó un portavoz de la Secretaría de Planeación y Ordenamiento Territorial, con la finalidad de comunicar que se mantienen en la revisión de la documentación de solicitudes para la realización del complejo cultural y subrayaron que caminarán con los habitantes para que sus atribuciones las destinen al levantamiento del proyecto.
A pesar de los avances, el plantón continúa en la esquina de Eulalia Guzmán y Plan de San Luis, lo que para algunos vecinos, desvirtúa el objetivo por el que se inició la protesta, ya que si la problemática era que la construcción del albergue provocaría que personas en tránsito habitaran en las calles aledañas, actualmente la presencia permanente de los vecinos en el sitio contradice la idea de la protesta por la que se canceló el proyecto del albergue.

Aunque el secretario de Gobierno, César Cravioto y Clara Brugada expresaron en conferencia de prensa que no continuarían los trabajos del albergue, varios habitantes exigieron que tras la promesa gubernamental cumplida, es inútil que continúe la protesta vecinal, para la cual, aseguraron, se realizan cooperaciones monetarias para suministros, artículos y lonas.
Dicha situación no controlada por los integrantes de la Comisión de Participación Comunitaria (COPACO), argumentaron que ha generado promesas débiles del Gobierno capitalino, sin que los avances sean significativos; además, que con el paso del tiempo, las dependencias envíen a las mesas de trabajo a funcionarios de menor nivel, sin que lo pactado se fortalezca ni se convierta en una realidad.
Cinco meses de plantón
En abril, los vecinos de la colonia Nueva Santa María lograron que el Gobierno capitalino cancelara el proyecto de albergue para migrantes.
Durante una reunión resolutiva, la Secretaría de Gobierno expresó que gracias a la presión y unión de los habitantes, aceptaron que el sitio no cuenta con las condiciones para albergar a personas en tránsito, y próximamente la Secretaría del Bienestar iniciará las mesas de trabajo para la construcción de un espacio cultural en beneficio de los vecinos.
A pesar de que los colonos contaban con documentación en la que el anterior Gobierno de Azcapotzalco, en conjunto con los vecinos, le exigían a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda que el espacio sea únicamente en el que se presten servicios culturales y/o sociales para los habitantes, además de que no se continúe con el proceso de desincorporación del predio, la SECGOB inválidó esos trámites, dado que, afirmaron, no cuenta con los avales suficientes para que el predio se destine a un centro de recreación para el deporte y las artes.
La SECGOB aceptó que a la brevedad se escuchen las propuestas y planes que los vecinos mantienen para la creación de la casa de cultura y que el terreno se utilice para el proyecto que los habitantes desean. Inclusive, una de sus ideas es que en la propiedad se haga realidad una Utopía.