Daniel Ordoñez, candidato a la alcaldía Iztacalco, propuso posicionar el nombre de esa demarcación en la publicidad oficial de la carrera de autos Formula 1, que se realiza en el autódromo Hermanos Rodríguez de la Ciudad Deportiva de Magdalena Mixhuca, de tal modo que se nombre: "Gran Premio Fórmula 1, Iztacalco, CDMX”.

Para el aspirante, dicho posicionamiento ayudaría que este territorio se convierta en un polo de atracción turística a nivel nacional e internacional y con ello, sea un generador de recursos adicionales en bien de sus habitantes.

"La Ciudad Deportiva tiene el autódromo Hermanos Rodríguez, en donde se hace la Fórmula 1 en Iztacalco; es el Foro Sol dónde se hacen todos los eventos, y ahora el estadio de béisbol de los Diablos Rojos, a parte del Palacio de los Deportes. Todos estos espacios tienen una concesión desde hace mucho tiempo a una empresa que se llama Ocesa".

"La alcaldía no recibe nada, o al menos no se ve nada de lo que recibe por estos eventos que ocurren permanente en Iztacalco”, dijo el aspirante.

Añadió que en cambio, lo que sí reciben los vecinos de las colonias Granjas México y Ciudad Deportiva, colindantes con el complejo deportivo de Magdalena Mixhuca, es la molestia por el cierre de calles durante una o dos semanas previas al campeonato automovilístico, aunado a la privatización de toda la Ciudad Deportiva, sobre todo en sus estacionamientos, pues se utilizan los campos de fútbol para acomodar coches, con su respectivo cobro de hasta 350 pesos por auto y por evento.

Ordoñez también señaló como otro problema la presencia de acomodadores de coches, mejor conocidos como “viene, viene”, quienes generan embotellamientos sobre vialidades primarias como Circuito Interior y Viaducto Rio de la Piedad, debido a que invaden el paso de automóviles con tal de ofrecer a los automovilistas estacionamiento en las colonias aledañas y hasta en cocheras de viviendas, ello a cambio de cobros que van de los 50 a los 150 pesos por coche.

"El que cierren la Ciudad de los Deportes y que nadie pueda entrar a jugar ni hacer uso de las instalaciones semanas antes, como ocurre con el concierto “Vive Latino”, requiere de orden, pues aunque estamos a favor de estos espectáculos, se requiere no afectar a los vecinos ni a los automovilistas, y en este caso, nadie hace nada".