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Han pasado nueve años desde que los vecinos de la colonia Estrella, en la alcaldía Gustavo A. Madero, solicitaron intervención a un edificio en construcción, actualmente abandonado, en Lapislazuli número 39, que está hundiendo a los inmuebles vecinos.
El edificio de 6 niveles rompió las normas y los vecinos relatan que, a pesar de que ya era evidente que había hundido la calle, se continuó construyendo por un tiempo hasta que las cosas se salieron de control. El Instituto de Verificación Administrativa del Distrito Federal colocó sellos de suspensión y clausura el 3 de julio de 2013.
Lapislazuli 39 rompió los límites de construcción establecidos para la zona, las casas vecinas están inclinadas peligrosamente hacia el edificio como si las estuviera chupado. En 2013 Protección Civil recomendó a los vecinos de los costados que desalojaran sus viviendas para evitar accidentes y cuidar su integridad. Un vecino directamente afectado, quien actualmente paga una renta en la misma calle, compartió que “soy dueño de uno de los departamentos afectados, llevo todos estos años pagando renta porque me desalojaron de mi vivienda, ¿quién me va a reponer ese dinero?
En agosto del 2014, la diputación Permanente de la Asamblea Legislativa del DF aprobó el exhorto para que diversas autoridades emitieran un informe sobre irregularidades en la construcción del predio, la construcción paró en dicho año, pero no ha habido solución de fondo.
“Mi tía fue una de las afectadas, ya tenía su vida hecha y tuvo que reiniciar, ella ya hasta falleció y los del edificio nunca le pagaron nada de sus rentas, esto es un problema de años”, explica otro vecino.
En 2014, las viviendas aledañas al edificio tuvieron que ser apoyadas con vigas de madera para evitar colapso, pero dejaron la entrada libre; los homeless aprovechaban el lugar para refugiarse, solían hacer fogatas con las maderas de la construcción, además almacenaban plásticos que provocaron un incendio hace dos años.
Para los vecinos, el incendio fue el límite, por lo que cooperaron con material para que la delegación pusiera una barda en la entrada del edificio.
“Cuando vimos tantos problemas, solicitamos una vez más que se atendiera el caso, expusimos lo del incendio y vinieron de la delegación a tapar la entrada del edificio y pusieron una barda de tabique con material que aportamos los vecinos”, asevera el vecino afectado.
No tiene ni un mes que el drenaje de la calle Lapislazuli se vio afectado. El personal que repara el drenaje sugirió que podría tratarse de un problema a causa del asentamiento del edificio.
Hace tres meses, las autoridades indicaron a los colonos que demolerían el edificio, pero no les dieron fecha, ni han vuelto a dar otro aviso: “Desde 2014 estamos buscando respuestas, buscamos que nos den resolución, pero no dan la cara”, finaliza uno de los vecinos.
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