A dos años de que cientos de mujeres tomaron la extinta glorieta de Colón para convertirla en un espacio de denuncia y protesta para erradicar la violencia hacia el sexo femenino, en la glorieta de las Mujeres que Luchan fue colocada una exposición de fotografías en las que se resaltan distintos momentos históricos en donde las féminas han tenido que salir a las calles para defender sus derechos y pelar por todas aquellas a las que se les arrebató la vida.

La demostración que lleva por título "mujer de lucha, mujer de luz", es un sitio que se les ofreció a las fotógrafas que han dedicado su oficio a retratar las diferentes manifestaciones de mujeres indígenas y madres buscadoras, las cuales han decidido manifestarse en varios estados de la República para exigirle a las autoridades que se esclarezca el paradero de todas aquellas que ya no están. Además de ser una galería de denuncia que pretende ilustrar la erradicación de las agresiones, las imágenes de la exposición solicitan que exista justicia para cada uno de los casos de las mujeres que salieron de su casa y jamás regresaron.

Entre las fotógrafas que tuvieron la oportunidad de lucir su trabajo, destacan Quetzalli Blanco, Elizabeth Díaz, Sandra Hordoñez, Paola Macedo, Lizbeth Hernández, Graciela López, Quetzalli Nicte - Ha y María Ruiz.

Previo a la inauguración de la exposición, las fundadoras y representantes del movimiento feminista expresaron que la propuesta fotográfica para lucha y la resistencia es un momento para reafirmar que las mujeres rebeldes no aceptan la injusticia, ni buscan el poder o la riqueza, sino la certeza de que en tiempos de odio, de crímenes e impunidad, no guardan silencio, porque eso nunca las protegerá.

"Mujeres de los colores de la tierra que construyen con otras; mujeres madres que llevarán consigo ese cartel a todas partes; mujeres justicia que no se van a olvidar nunca más; mujeres abrazo que buscan con ojos de luciérnagas el corazón manantial, de piel de raíces, de cabellos de viento que pierden la sonrisa; mujeres sabias en cuerpos pequeños; mujeres que han sido arrancadas y aun así florecen", declararon las fundadoras.

"Las mujeres de esta exposición son tu hermana, tu hija, la niña con quien te cruzaste en el mercado a tomar ese camión, la anciana que casi nunca ves, tu madre. Esas mujeres te miran y te enseñan a observar con el corazón", señalaron.

Después de que las líderes de los colectivos exaltaron los rostros de las desaparecidas y los retratos de los momentos más álgidos de las protestas, las asistentes danzaron bailes regionales e instalaron una ofrenda floral, en representación de las mujeres mexicanas víctimas de violencia.