Metrópoli

Mexico le ha quedado a deber en sus derechos a comunidad "trans"; gays y lesbianas han alcanzado visibilidad

Desde las 10 de la mañana cientos de miles de mexicanos se dieron cita en el Ángel de la Independiencia para enfilarse hacia el Zócalo capitalino para protestar en medio de una algarabia colorida y exigir una legislación que abra la puerta a los derechos de todos

Fiesta  por la diversidad

EFE

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En la marcha número 45 de la comunidad LGTBQ+ hubo una consigna política festiva: derechos para los transexuales; gays y lesbianas ya fueron aceptados por la sociedad, pero la comunidad trans encuentra el obstáculo de encontrar un empleo y reconocimiento pleno, pese a que hay sentencias del Poder Judicial para garantizar desde la infancia el reconocimiento a qué género se quiere pertenecer.

Cientos de miles de mexicanos al unísono se dieron cita desde las 10 de la mañana en el Ángel de la Independencia para mostrar el acarreo del amor por todo Paseo de la Reforma hacia el Zócalo capitalino, en medio de una temperatura ambiente de 31 grados centígrados que se desbordó por toda la Ciudad de México.

Nula fue la presencia policiaca, quizá porque son de las marchas más amorosas que vive una vez al año la Ciudad de México; civilidad, cortesía, paz, amor, fueron los colores de la marcha que recuerda aquella de Nueva York hace 45 años pero manchada de sangre.

No se distinguían hombres o mujeres, eran todos, y en esta manifestación se atrevieron a apoderarse la principal vialidad del centro de la capital con sus  tráileres que circularon por la emblemática Paseo de la Reforma.

La movilización dejó sin duda una gran derrama económica para aquellos dedicados al trabajo informal y que cada 24 de junio pueden hacer su agosto libre de líderes del ambulantaje.

Más de 850 mil personas, de acuerdo con estimaciones previas del gobierno capitalino, paralizaron la capital del país sin que en redes sociales hubiera consignas de repudio.

Rostros de hombres, jóvenes, adolescentes, menores de edad se hermanaron en una consigna: exigir el respeto a la diversidad sexual.

La comunidad hoy se integra por gays, lesbianas, bisexuales, transexuales, pansexuales y un diccionario no binario que nos lleva a la cotidianeidad de decir que todos debemos ser felices.